#5

677 78 1
                                    

— Las rosas rojas son siempre hermosas para regalar ya que su significado es el amor, lo mismo para los claveles rojos — Hablo Yukiko a un joven que miraba los ramos de rosas entusiasmado

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

— Las rosas rojas son siempre hermosas para regalar ya que su significado es el amor, lo mismo para los claveles rojos — Hablo Yukiko a un joven que miraba los ramos de rosas entusiasmado.

— Es el cumpleaños de mi madre ¿Qué recomendaría?

— Los girasoles son un clásico, si las combinamos con unas Lisianthus tendrá el significado de, te admiro y gratitud.

— Bien, llevaré un ramo de ellas.

— Lo acomodaremos enseguida y en caja lo paga — La chica se acomodó los anteojos y se dispuso a armar un bello ramo con aquellos flores, con el cual se fue satisfecho el cliente.

— Aun no entiendo cómo te sabes el significado de cada flor —Hablo el chico detrás de caja, Itsuki Sohada, cabello negro, ojos grises, alto y de apariencia alegre.— Ni yo que llevo mas tiempo aquí se eso.

— Las flores son muy lindas, me encanta como cada una significa algo diferente.

— ¿Y cuál me darías a mi? — Pregunto el joven.

— Un Lirio.

— ¿Y su significado es...?

— Confianza.

— Me alegra ser de confianza para ti.

— No te la darías por eso — Itsuki le miró confundido — No me gustan los Lirios, son las flores que más odio.

El joven se colocó una mano en el pecho — Acabas de herir mi corazón.

La pelinegra le mostró una sonrisa tierna y divertida.

— Tengo que ir a casa, ¿Cerraras tu, o nos vamos ya? — Pregunto Yukiko quitándose el delantal.

— No creo que nadie venga a esta hora, vámonos juntos.

El chico acomodó las cosas, apagó las luces, salió junto con la chica y cerró el lugar.

— ¿Y bien? ¿Cómo te fue la última vez? — Pregunto Itsuki.

Yukiko sonrió avergonzada — Bien, fue hermoso ¿sabes?, dijeron que me llamarían pronto para volver.

— Te dije que tuvieras confianza en ti misma, antes de ir la próxima vez, práctica conmigo, me hace falta alguien que me enseñe como tú.—El joven paso un brazo por encima de los hombros de la chica, está chasqueo incómoda — Cierto, cierto, espacio personal, perdón. — Paro de caminar y Yukiko imitó su acción — No te vi ayer que fue San Valentín y tampoco había podido darte nada... Hasta ahora. — Itsuki saco de su bolsillo una plumilla de guitarra. — Se que no es lo que quieres pero por algo se empieza, es de tu color favorito y logré que tuviera tus iniciales.

Yukiko la tomo y salto a darle un fuerte abrazo al pelinegro — ¡Es hermosa! — Gritó — ¡Soy tan mala amiga! Yo no te he comprado nada.

— Puedo perdonarte si prometes practicar conmigo la próxima vez.

— ¡Itsuki! — Se quejó — No

— Entonces no abra plumilla — Se la arrebato de las manos y se puso de puntillas para evitar que Yukiko la tomara.

Incluso intentando saltar no la consiguió — Está bien, pero que no esté tu hermano la próxima vez, me molestan sus atenciones extremas.

— Solo tiene 5, y cree que eres su novia, es tierno, pero bueno, te prometo que no estará

— Oye — Yukiko le llamo, rebuscando entre su bolso — Son galletas, no las hice yo y tampoco las puedo comer ¿Las quiere Sr.gloton?

— ¿Me las das porque no compraste nada o porque no las puedes comer?— Dijo tomando la pequeña caja.

— Ambas, pero más que nada porque no puedo comerlas, y lo de que no compre nada, te lo compensare pronto.

El pelinegro abrió aquel pequeño obsequio y pregunto — ¿Quién te las dio, algún enamorado de San Valentín?

Yukiko río un poco — Eso no me pasa, son por parte de la escuela, obsequio por el día ¿Tal vez?, No sé y no me interesa.

— No creo que la escuela de llaveros personalizados — Dijo sacando una pequeña Yukiko, una muñequita de cabello largo color negro, ojos miel y unos anteojos grandes- Espero que no estés engañando a mi hermano.

La joven tomo aquello en sus manos, ¿Narumi se había tomado la molestia de hacer algo así?.

— ¿Me lo puedo quedar? Será como llevarte conmigo siempre.

Yukiko sonrió con vergüenza — Haz lo que quieras.

Los chicos retomaron su camino a casa, se separaron en la parada de autobús, ambos tomando diferentes rumbos.

Cuando entro a casa vio a su padre en la sala dormido frente al televisor con Narumi a su lado.

Apagó la TV y se fue a su cuarto, acomodó sus cosas para después irse a dormir no sin antes apreciar aquel bonito detalle de Itsuki.

Apagó la TV y se fue a su cuarto, acomodó sus cosas para después irse a dormir no sin antes apreciar aquel bonito detalle de Itsuki

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Verdad | Ouran Highschool |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora