Las vacaciones de invierno han terminado, otra vez a la rutina, otra vez a soportar estudiantes sin ningún tipo de disciplina.voy con destino a mi trabajo, con los ánimos en el suelo. Entro y todos los estudiantes que me ven se ponen firmes a la vez que me saludan, solo hago un asentimiento de cabeza y entro a mi oficina, dejo mis cosas en el escritorio, miro mi reloj y faltan sólo segundos para que mi primera clase después de vacaciones empiece.
Vuelvo a tomar mis cosas y voy al aula correspondiente. Estoy a unos diez pasos de llegar cuando el timbre suena, entro y todos están callados, sentados con la espalda recta, saludo y ellos se ponen en pie para saludar, se sientan y uno por uno traen sus trabajos que les dejé hacer durante las vacaciones.
Cuando han pasado todos, miro el salón y cuando estoy apunto de hablar alguien toca la puerta.
Camino hacia ella abriendola cuando he llegado, dejándome a la vista a una joven con la mirada dulce, que me provoca que me ponga de más mal humor, parece que no hablará y hablo yo.-._¿Se le ofrece algo, señorita?-._pregunto arrogante.
-._ Buenos días, soy la nueva estudiante transferida, ¿puedo pasar?-._me responde.
-._La nueva, no tengo ningún reporte de una nueva estudiante-._le respondo igual que antes.
-._Lo siento, apenas la transferencia la hicieron hace un par de días-._me dice ella con voz educada-._¿puedo pasar?
-._Tienes 10 minutos de retraso-._digo mirando mi reloj.
-._Me he perdido tratando de buscar mi aula correspondiente-._me responde ella avergonzada.
-._Sepa que es primera vez que dejo pasar a alguien con tal retraso, no obstante tendrá una tarea extra por la oportunidad-._digo abriendo más la puerta para que pase.
Entra y se queda enfrente del salón aun lado mío.
-._Toma el lugar que quieras-._digo con fastidio
Ella me hace caso y como el único que está disponible es el que está enfrente de mi escritorio, ella toma ese lugar y yo decido volver a lo de antes.
Cuando por fin terminó la jornada, regresé a mi casa, entré y como siempre no había nadie. Todo estaba en silencio. Dejé mis cosas y me fui a dar una ducha. Salí y me vestí para ir a la cafetería la cual siempre voy como de costumbre. Tomé un libro y salí de mi casa; aborde mi auto y emprendí mi camino hacia la cafetería. Llegué y estacioné mi auto, bajé y cuando estaba por cruzar la calle, vi a lo lejos a la nueva alumna, no sé su nombre aún, pero vi que entró a la cafetería a la que yo entraría; cruzé y me senté en la mesa de siempre la más alejada junto a la ventana. Saqué mi libro y comencé a leer; luego llegó una chica para tomar mi pedido, le pedí lo de siempre, un café europeo. Regresé mi vista al libro, pero después mi concentración fue enterrunpida con el grito de un chica; levanté mi vista cual chismosa con fastidio y vi que era la chica nueva que estaba muy bien abrazada a otra chica; sólo de verlo me causó asco, como se abrazaba y después la otra chica la tomaba del cuello y la atraía hacía ella para que la pudiera besar, fue entonces cuando más asco me dio, guardé mi libro y me puse de pie, esperando encontrar con la mirada a la joven que tomo mi pedido, pero no tuve suerte, y no quiero ir al mostrador porque tengo que pasar por la mesa de ellas.
Con resignación paso por allí tratando de no mirarlas, más fue imposible por que la alumna nueva me habló.-._Profesora!, buenas tardes-._me dijo ella aun agarrada de la chica y con voz entusiamada.
La miré lo más normal que pude y contesté.
-._Buenas tardes-._dije tratando de que no saliera con tono de asco.
Ella sólo hizo una sonrisa incómoda, pasé rápido, pagué el café que había pedido y salí de allí, subí a mi auto, arranque. Me dan asco ese tipo de personas, no tienen ni un poco de vergüenza de ser lo que son. Si harán tal acto pues que lo hagan a escondidas y no en público, ¡eso es asqueroso!
Regresé a mi casa, no tenía a donde más ir, me cambié de ropa a una más cómoda, me metí a la cama para ver si podía dormir un poco y tratar de quitarme de la mente la escena asquerosa que vi anteriormente, pero me fue imposible.
Con fastido me levanté y prepare la clase para el día siguiente. Bajé las escaleras y me dirigí a la cocina, tomé un vaso y me serví un poco de agua, al poco tiempo escuché la puerta principal abrirce y cerarse a su vez, cuando a los segundos veo que aparece Eliot.-._Hola-._saluda entrando a la cocina.
-._Hola-._digo sin ánimos.
El toma un vaso y se sirve también agua.
-._¿Cómo te fue hoy?-._le hablé tratando de entablar una conversación con él.
-._Igual de pésimo-._me respondió restandole importancia.
En eso se acerca y me toma de la cintura, me da un beso en la frente para luego bajar a mi cuello y besarlo.
-._¿Por qué mejor no nos divertimos?-._me dice en un tono seductor.
-._Hoy no, estoy cansada-._mentí, solo no quiero estar con el fingiendo que siempre me hace llegar aún orgasmo al que tiene mucho tiempo que no llego.
Él me suelta algo brusco y se aleja a paso fuerte; después escucho como la puerta vuelve a abrice y a cerarce.
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Profesora Homofóbica
RomanceAsco, repugnancia y odio. Eso era lo que le causaba. Placer, jadeos y gemidos. Eso fue lo que le causó después.