Dylan Neil [✔️]

22. Apagón

Melanie

La campanilla que anuncia la llegada de alguien en la tienda suena apenas cruzo por la puerta de cristal. La primera que se percata de mi presencia es Rebekah quien deja de mirar a su celular al verme. Ella y Dexter están uno junto al otro.

—Melanie —dice ella sonriendo —Que grata sorpresa.

—Hola, manzanita —Dexter me saluda y entonces hago mi camino hasta ellos.

Veo de reojo como Dylan está en la caja registradora terminando una venta a un señor y solo me mira unos segundos antes de proseguir con lo que está haciendo.

—Necesito hablar con ustedes —digo sin más.

—¿Está todo en orden? —pregunta Dexter con el rostro preocupado.

"Si vomitar sangre de animal lo es..."

—Oh, ¡Mierda! —dice Rebekah, su hermano y yo la miramos confundidos.

Ella sonríe angelicalmente mientras rodea el mostrador para salir y pararse junto a mí.

—¿Qué sucedes? —pregunto.

—Lo siento, olvidé que tenía que llamar a una amiga que esta de cumpleaños hoy y-

—¿Qué amiga? Tú no tienes amigas. —Dexter frunce el ceño, pero su hermana solo lo fulmina con la mirada.

—Sarah —dice seriamente y luego corre hasta Dylan, le susurra algo mientras el hombre que anteriormente estaba atendiendo sale de la tienda.

Ya no hay más personas, solo nosotros cuatro.

—Sarah cumplió años hace dos meses, lo sé porque me pasé días buscándole un regalo perfecto, lo cual, por cierto, conseguí. —comenta Dexter más para sí mismo que para mí y entonces la incertidumbre empieza.

Veo la hora en el reloj dorado que mi mejor amiga me prestó antes de salir de casa y noto que falta una hora para que Elías pase por mí y Blue.

''Quizás debí venir más temprano...''

Una fuerte tormenta está aproximándose, el tiempo es tan oscuro que parece casi las nueve de la noche cuando es apenas las seis de la tarde.

—Debería irme —digo llamado su atención —Puedo pasar otro día.

—Espera, espera —Dylan rodea la caja registradora para salir de allí y caminar hasta mí —Acabas de llegar, ¿qué pasa?

Rebekah y Dexter salen respectivamente de donde se encontraban cada uno y se acercan hasta quedar junto a su hermano.

—Chicos...

No termino de decir algo más porque un rayo eléctrico suena por todo el lugar.

Grito sin poder evitarlo y en seguida todo se sume en oscuridad. La lluvia comienza a caer veloz y de manera torrencial casi como si el cielo quisiera desplomarse sobre nosotros.

—¡Parece que nos hemos quedado sin electricidad! —grita Dexter por encima de la lluvia. —Pero al juzgar por como no veo luz alguna por la plaza supongo que es un apagón en todo el pueblo.

Rebekah que aún sostiene su celular en la mano pone la linterna para iluminar.

—Cerraré las puertas —avisa Dylan mientras se aleja.

—¡Genial! —exclama Rebekah con sarcasmo mientras ve la pantalla de su celular con el ceño fruncido —No hay señal telefónica, esto debe ser una maldita broma.

—Un rayo dejó al pueblo sin luz y ¿tú solo te preocupas por tu teléfono? —le dice Dexter.

—Esto es malo, muy malo. —digo ahora yo nerviosa. —Debo volver a casa, la señora Hamilton se preocupará y Elías... —niego repetidamente.