Dylan Neil [✔️]

27. Cosas interesantes

Melanie

La luz del día hace que lleve las manos a mi cara, ya ha amanecido y tengo muchísimo frío, por ello comienzo a removerme incómoda en la cama. Al abrir del todo los ojos contemplo perezosamente los trazos del techo.

Entonces el sonido de mi celular me hace sentarme en la cama y veo que está en la mesita de noche a mi lado izquierdo. Hay una nota pegada a la pantalla, pero la ignoro al retirarla mientras estiro mi mano al celular y lo contesto.

—¿Hola? —no tengo el número registrado.

—¡Joder! Estás viva —suspira contra el celular y sonrío al saber quién es.

—Oh... Elías, sí estoy viva.

—¿Te encuentras bien? Blue y yo estuvimos muy asustados cuando nos dimos cuenta de lo que ocurrió en la plaza y tú estabas allí.

Revuelvo mi cabello y alejo las sábanas de mi regazo para ponerme de pie.

—¿Kalev les dijo que estoy con los Neil? —pregunto ignorando todo lo que dijo.

—Lo hizo, por eso dejé de insistir con las llamadas y esperaría a que amaneciera para llamarte otra vez.

—Elías, no tengo idea de que fue lo que pasó en la plaza, pero lo que sí sé es que los hermanos Neil me sacaron de allí lo más rápido posible y me trajeron a su casa sana y salva, no te preocupes por mí ahora —lo tranquilizo y me acerco a paso lento a la ventana para correr las cortinas. Cierro los ojos un segundo por la claridad, pero al instante los vuelvo a abrir para toparme con un bosque enorme y gotas de lluvia cayendo suaves por el cristal —Discúlpame por no haberte acompañado al evento.

—No digas tonterías, lo importante aquí es que estas a salvo —Elías suena cansado y hace una pausa antes de seguir —Por cierto, el funeral de mi madre será mañana a las diez de la mañana en la iglesia central de El Valle, no sé si querrás ir, pero Kalev dijo que iría con tu madre.

—Elías, por supuesto que voy a ir —asiento frenéticamente, aunque sé que no puede verme —No te dejaré sólo.

—Gracias, Melanie, te enviaré la dirección por mensaje. Significa mucho para mí y mi padre, tu familia siempre ha sido parte de la nuestra. Nos vemos mañana. —se despide y quiero decirle lo mucho que cuenta con mi apoyo, pero al no encontrar las palabras me trago el sentimiento y dejo que cierre la llamada.

Bajo el celular y guardo su número entre mis contactos. Comienzo a revisar los mensajes y las muchas llamadas.

Capta mi atención que las llamadas perdidas iban desde: Blue, Kalev, Ashton, Elías y la señora Celeste, pero ninguna de mi mamá.

"Mamá..."

—Debo hablar con ella —digo bloqueando el celular. Observo el bosque unos segundos y me giro —¡Mierda! —sin querer el celular se me cae de las manos y Dylan ríe —¡Me asustaste! ¿Hace cuánto estás sentado allí?

—No mucho —dice subiendo los hombros y entonces se pone de pie ya que se encontraba en la esquina de la cama. Observo la puerta abierta y lo miro, no puedo creer que haya entrado a la habitación y ni cuenta me he dado. —¿Hambre? —pregunta mientras se agacha para levantar mi celular y me lo entrega —He preparado el desayuno.

—La verdad es que sí —sonrío —Debes cocinar muy bien —insinúo al recordar que el chico es italiano.

—¿Disculpa? —se lleva una mano al pecho —¿Crees que porque soy italiano inmediatamente debo cocinar como un chef? —arquea una ceja mirándome serio y yo me sonrojo ¿Acaso también lee mentes? Dylan sonríe con gracia —Porque si eso es lo que piensas entonces estás en todo lo correcto —Se lleva los dedos a la boca y lanza un beso al aire —Se porti il ​​cognome Neil e non sai come cucinare, sei un disonore per la famiglia, dice la nonna.*