Dylan Neil [✔️]

32. Encuentros familiares

Melanie

—Te vengo a buscar a la hora de la cena, ¿te parece a eso de las ocho de la noche —dice Dylan mirándome ya que estoy en el copiloto —Así hablamos con más calma sobre lo que sucedió con tu madre.

—Sí, cielito lindo, ¿te parece a esa hora? —prosigue a decir Dexter mientras asoma la cabeza entre medio de los asientos.

Me ruborizo. Dexter es esa clase de hermano burlón.

"Rebekah, ayuda..."

—No digas más —responde ella y le da un jalón a su hermano para que vuelva a acomodarse en su lugar —Déjala tranquila.

—Aburridas —se queja el de lentes acomodando su abrigo verde y sentándose mejor.

Dylan se ríe viendo a sus hermanos por el retrovisor.

—Me parece bien... —le respondo a Dylan su pregunta y él sonríe.

Lo veo apoyar el codo izquierdo en la ventana y se lleva la mano de ese mismo brazo a sus labios jugando con el inferior mientras me observa quitarme el cinturón de seguridad.

—Nos vemos.

—¡Oye! —Dylan tira de mi hombro y lo miro —¿Así te despides? —arquea una ceja y trago saliva.

"¿Acaso quiere que lo bese? ¿Ya estamos en ese punto?"

—Sí, Melanie ¿Así te despid...? —repite Dexter de manera sarcástica, pero no termina la frase ya que Rebekah le da un puñetazo en el hombro —Auch, ¡siempre con la violencia, Marie!

—Drama King —susurra Rebekah.

Observo a Dylan unos segundos que se me hacen eternos. Ignorando a sus hermanos discutiendo atrás, pero ahora en italiano.

—Oh, Melanie... —niega inclinando su rostro al mío —¿Ritardi sempre nel comprendere le cose?* —sonríe y deposita un beso en mis labios.

Siento que me falta el aire. Lo miro cuando se separa y se acomoda de vuelta en el asiento.

Abro la puerta rápidamente y salgo fuera antes de oír algún comentario por parte de Dexter. No me giro para ver el auto irse, sé que lo veré más tarde así que me adentro a casa de Blue.

❁❁❁

Dylan

La lluvia ha dejado de caer. Todo lo que nos dejó fue frío, carreteras mojadas y un ambiente opaco a esta hora de la mañana. Aunque no dudo que vuelva a caer en unas horas.

Estaciono en la parte de enfrente del local y apenas mis hermanos y yo bajamos escuchamos a nuestro padre decir: —¿Se puede saber dónde estaban los tres?

Mi padre está parado afuera del local. Viste su distintivo uniforme de policía y la patrulla que usa junto al oficial Blake está estacionada a unos metros.

—Teníamos que hacer un... —comienzo, pero lo veo subir una mano en mi dirección para que no siga hablando.

Mis hermanos me miran y yo a ellos.

"¿Qué hace tan temprano por aquí?"

—Hay gente trabajando en las reparaciones, no pueden dejar la tienda sola —prosigue —Se supone que deben estar aquí cuidando y vigilando que todo esté en orden.

—No veo a estos trabajadores tan ineptos como para querer robarle al comandante del pueblo —Rebekah rueda los ojos.

—¿Y eso qué, Rebekah? no debieron irse los tres.