También en otra vida (JeonJungkook)

14

Mi cuerpo estaba cómodo, estaba en un lugar acolchonado, caliente y cómodo lo que me hizo comprender rápidamente de que estaba sobre una cama. Abrí los ojos y parpadeé un poco aclarando el color blanco del techo dándome cuenta de inmediato de que sí era mi habitación.

Los recuerdos de cómo había llegado hasta aquí me llevaron al momento de la piscina y una sensación de pánico volvió a invadirme, sentí como me recorría toda la columna y como si de nuevo estuviera pasando el momento, sentí el tacto frío de esa mano en mi brazo haciendo creer ese pánico y haciéndome tener la paranoia de que alguien estaba viéndome desde la oscuridad de la esquina de la habitación. Miré a todos lados asegurándome de que no hubiera nadie acechándome.

Estoy volviéndome loca.

Me incorporé en la cama, quitándome las cobijas y dándome cuenta de que no llevaba la misma ropa, era obvio, no me dejarían en mi cama con toda la ropa mojada. Solo espero que hayan sido las chicas las que me cambiaron.

Me giré para quedar sentada a la orilla de la cama para poder ponerme los zapatos y salir de mi habitación directo a las escaleras tratando de encontrar a alguien. Era de noche, no había visto la hora por olvido y solo esperaba que no fuera tan noche como para no encontrar a nadie.

Caminé hasta el comedor donde abrí la puerta con cuidado de no hacer ruido con la esperanza de encontrarme a Jungkook.

—¿Sunhee? -su voz me asusto tanto que me hizo brincar del miedo -lo lamento, lo siento, no quería asustarte

—Jungkook -él estaba dentro en el comedor, sentado en su lugar de siempre

—¿Qué haces aquí? Deberías estar durmiendo -se levantó de la silla y se acercó a mi rápidamente

—Estoy bien -sonreí un poco tratando de amortiguar la "gravedad" del asunto -no fue nada

—Insisto en que deberías regresar a la cama. Les pediré a las chicas que lleven la cena

—Es solo que... -juguete un poco con mis manos -no quiero estar a solas en la habitación, prefiero cenar aquí -lo miré -contigo -dije en un susurro

—En ese caso -una cálida sonrisa apareció en su rostro -yo cenaré contigo, en tu habitación. Ahora sube y recuéstate, en un momento estoy contigo

—...De acuerdo -sentí un gran alivio al saber que me acompañaría -pero no tardes ¿Quieres? -una sonrisa aún más amplia se formó en su rostro y no pude evitar sonreír también

—Prometo que no tardaré, anda, sube

Le sonreí como despedida y salí del comedor. Estaba asustada, tenía miedo de que esa cosa apareciera frente a mí de nuevo, me sentía como una niña de 5 años, aterrada de la oscuridad y de lo que se escondía en ella.

Regresé a mi habitación, pero no cerré la puerta, la dejé abierta en caso de que tuviera que salir corriendo, gritando y pidiendo ayuda. Volví a recostarme en la cama esperando atentamente la llegada de Jungkook.

Pasó poco tiempo cuando él apareció y arrastró la mesa de té que había en la habitación hasta dejarla a un lado de mi en la cama y a mí me dieron una mesita sobre mis piernas para poner la comida más cómodamente.

—¿Te sientes mejor ahora? -preguntó mientras las chicas ponían nuestra comida sobre nuestras mesas

—¿M? -tenía mi atención en otras cosas -oh, sí, me siento mucho mejor ahora -sonreí

—Podrías... -hizo una pausa esperando a que las chicas se fueran de la habitación -¿Podrías decirme qué fue lo que viste en el agua?

—¿Lo que vi? -sentí como la piel se me puso de gallina -es que yo... -tuve que soltar el tenedor sobre el plato para que no se notara como había comenzado a temblar -dijiste... que jamás habías visto un fantasma ¿Cierto? -no me atrevía a mirarlo a los ojos, por eso concentraba mi mirada en el plato

—¿Viste un fantasma?

—No quiero decir que fuese eso, pero... -levanté la mirada para enfrentarlo -juro que alguien o algo me tomó del brazo -chille un poco

—Dime todo lo que viste -su tono suave y reconfortante me dio la seguridad y la valentía para seguir hablando, no se estaba burlando de mi ni me estaba mirando como una chiflada, al contrario, parecía interesado por mi historia

Terminé contándole todo, desde el hermoso pez hasta esa cosa aterradora, lo que hizo, cómo lo sentí, absolutamente todo mientras él me escuchaba atentamente.

—Piensas... ¿Qué estoy loca? -pregunté nerviosa

—No -respondió rápidamente -jamás pensaría eso de ti

—Tal vez fue solo mi imaginación -dejé caer mi cabeza hacia atrás con los ojos cerrados

—¿En serio crees que fue tu imaginación?

—No, pero tampoco puedo decir que fue real, es que... es que todo fue tan rápido que no logro entenderlo

—¿Y el pez?

—Quiero creer que también fue parte de mi imaginación -lo miré -aún no lo entiendo, estoy demasiado confundida

—No necesitar romperte la cabeza tratando de entender las cosas, a veces solo tienes... -levantó los hombros -dejar que las cosas pasen, sin encontrar una respuesta

—Se lo dices a un ser humano, un ser que por naturaleza busca respuesta de las cosas a como dé lugar -le sonreí y él me regresó la sonrisa

—Si tanto quieres una respuesta, puedes buscarla ahora -tomó su cubierto para tomar un poco de su comida -ahora lo bueno sería que concentraras tu energía y pensamientos a comer -se lo llevó a la boca

Cuando él se fue, aún no me sentía tranquila estando sola con la puerta abierta, me daba más miedo pensar que alguien se asomará por el marco de la puerta, así que la cerré y dejé las luces prendidas.