Caminamos juntos hasta el gran salón. Había visto a muchas personas trabajando, pero no esperaba que lo hubieran arreglado con magníficamente. Los grandes candelabros en el techo brillaban con las luces haciendo que los pequeños cristales que los conformaban soltaran pequeños resplandores, las mesas con los manteles blancos y los centros de mesa se esparcían por todo el salón, las sillas con marcos y patas doradas, con sus tapices floreados eran como en la antigüedad. Había una mesa larga al fondo con una pirámide de copas de cristal llenas de alcohol como centro y a su alrededor había charolas doradas llenas de bocadillos muy llamativos por sus colores, tanto salados como dulces, además de más copas con bebidas. Era como haber revivido una fiesta de 1770.
Hubiera preferido que el código de vestimenta fuera con vestidos de esos años, pero, eso solo era uno de mis deseos, un baile con temática.
Como era su acompañante, tuve que estar a su lado todo el tiempo, saludando a todos los invitados de la fiesta, andando de un lado al otro en todo el salón, sonriéndole amablemente a personas que jamás en mi vida había visto.
—Que señorita tan hermosa, Jeon -la mujer con varios años encima me miraba amablemente después de que nosotros nos acercamos primero a saludarla -¿Es su novia?
Tragué con fuerza el trago de la bebida que había tomado de la copa que llevaba en las manos y la miré lista para negar su idea errónea.
—Claro que sí, es muy hermosa ¿No? -Jungkook sonrió divertido, sin darse cuenta de que yo lo miraba sorprendida y simplemente había dejado su mano sobre la mía que había vuelto a envolverse en su brazo
—¡Totalmente! -contestó la mujer emocionada -es una señorita muy hermosa
Yo solo podía sonreír nerviosa ante sus cumplidos.
—Pensaba presentarle a la nieta de una de mis mejores amigas, pero creo que llegué demasiado tarde
—Me alaga con sus palabras, señora Amery, pero ya soy de la señorita Sunhee
Me gustaría que fuera realmente así pensé en un momento sin dejar de sonreír, aunque en el fondo me dijera a mí misma que sus palabras eran mentira.
La mujer era bastante parlanchina y yo solo quería sentarme un momento y dejar de sonreír, me dolían las mejillas y quería tomarme un descanso.
—¿Te molesto lo que dije? -los dos por fin habíamos dejado se saludar personas y nos habíamos tomado un momento para acercarnos a la mesa de los bocadillos
—¿Qué cosa? -tomé un pequeño panquesito de vainilla con cubierta de betún rojo y una cereza
—Ser mi pareja
—¿Por qué debía molestarme por una pequeña mentira como esa? -me lo llevé a la boca y le di un mordisco
—No era mi intención incomodarte -meneó el vino que aún quedaba en su copa
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También en otra vida (JeonJungkook)
FantasíaNuestras vidas pasadas son el inicio o la continuación de la existencia de nuestra alma, muchas veces dejamos cosas sin completar y venimos a esta vida a completar esos pendientes, a encontrar a esas personas que fueron importantes para nosotros o a...