De las peores confusiones

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Takano Masamune:

Por más raro que sonara, molestar al hermano de mi futura prometida era muy agradable. Habíamos llegado al departamento de An, y estábamos viendo fotos de ella y de su hermano.

Ambos castaños aparecían simultáneamente en casi todas las fotos, se veía que eran muy unidos. Había fotos de la graduación de Ritsu, se vía un poco más joven, aunque no demasiado como si el tiempo no pasará por su hermoso rostro.

Había fotos de ambos cuando eran bebés, en una de ellas Ritsu abrazaba a su pequeña hermana mientras lloraba, como si tuviera miedo de que se la quitarán "me preguntó porque habrá puesto esa cara" pensé divertido.

— Oh, y esta es mi cumpleaños número 14. — comento la chica. Era curioso el contraste que hacía aquella chica vestida completamente de negro de la foto, con la An de la actualidad.

— Es de la época rebelde de An. — comento el castaño.

— ¿Época rebelde?

— Si, por esos tiempos An decidió rebelarse contra nuestros padres y empezó a vestir raro y ser arrogante, además de bajar en calificaciones solo como capricho.

— ¡Ritsu! — grito sonrojada la chica. — N-no le hagas caso Takano.

— Hubiera Sido lindo verte en tu faceta de rebeldía.

— No lo creo, se la pasaba ignorando a todo el mundo.

— Ritsu ya vasta...

— Jeje, lo siento. — acarició la cabeza de su hermana.

"Esto es bueno" pensé, después de todo Ritsu no había sonreído así desde que llegó, así que el verlo sonreír me decía que ya había tomado la suficiente confianza, por lo menos para sonreír frente a mi.

— ¿Quieren algo? ¿Café, te? ¿Algo?

— Un café estaría bien. — conteste con una sonrisa.

— Yo lo haré. — ofreció el castaño mientras se levantaba.

— Vamos Ritsu, estás como invitado. Además no es como si no pudiera hacer un café sola, y tú de seguro quemaras el agua.

— Eso es imposible.

— Estoy segura de que hayaras una forma de lograrlo.

— No exageres. — dijo entrando a la cosina siendo perseguido por An que realmente creia que algo podría explotar con su hermano calentando el agua.

Seguí viendo las fotos, en cada una de ellas Ritsu se veía muy adorable. Había fotos de su niñez, de el como adolescente, sin alguna señal de rebeldía, de él ya un poco más actual y esa foto... Esa foto que llamo tanto mi atención. En ella estaba un hermoso castaño de ojos verdes con una linda y gran sonrisa tomando por la cintura a una hermosa chica de cabello oscuro y ojos de fuego.

"¿Quien... Es ella...?" "¿Porque Ritsu sonríe así en la foto...?" "¿Porque me siento tan extraño al ver esto...?" En un impulso sin sentido tome y guarde la foto en mi bolsillo, como si quisiera desaparecer a esa chica de los recuerdos del castaño. Y lo peor no era eso, si no el hecho de preacticamente no había sentido para tal estupidez.

Ambos castaños regresaron a la sala, An cargaba en una bandeja las tazas calientes y Ritsu traía algunas galletas en otra bandeja.

— ¿Porque ni siquiera me dejas cargar las tazas?

— Porque podrías provocar algún accidente. — dijo entre risas, a lo que el castaño respondió con un adorable puchero.

— ...Takano ¿Estás bien? — pregunto el chico.

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