Takano Masamune:
El idiota acababa de irse, genial al fin estaba a solas con ella. Se había atrevido a llamarla "princesa" y si no fuera porque ella quitó su mano, ¡hubiera besado está! Aunque cuando la quito sentí la mayor felicidad de mi vida.
— Gracias Takano. — se acercó al tiempo que me entregaba unos papeles.
Anteriormente le había "ayudado" a librarse de Haitani, al principio no comprendía bien, pero al parecer a ella no le agradaba mucho que Haitani le coqueteara, otra razón por la que la amó. Pero aún así no estaba en mis planes dejar esto así.
— ¿Porque? — pregunté tomando los documentos.
— Pues por ayudarme con lo de Haitani.
— Ah, no es necesario que agradezcas...
— Bueno...
— Porque hoy iremos a tu casa a terminar con el manuscrito que nos corresponde. — la interrumpí.
Se quedó callada por unos instantes, claro no pensaba ayudarla a ella si no a mí.
— ¡¿Que pero ya es muy tarde?! Además ¿Que pensaran los vecinos de que una chica soltera acepte a un extraño a tales horas de la noche?
— Solo di que soy tu prometido y problema solucionado.
— ¡Hablo enserio! — El color carmesí se apoderó de su rostro.
— Yo también lo hago, no creas que simplemente te estaba ayudando, no me gusta mentir así que lo mínimo que puedes hacer es cumplir con tu palabra.
— Pe-pero...
— Es mejor que nos vallamos de una vez, vamos Onodera. — finalice y la tomé de la mano. Fuí eternamente feliz al notar que no negaba mi contacto como a Haitani.
•••
Estábamos en la puerta del departamento de la chica, no había nadie alrededor.
— Pasa... — dijo metiéndose al departamento.
Hice lo que dijo, ella cerró la puerta tras de mí. El teléfono sonó desde la cosina.
— Ahora vuelvo, por favor siéntate.
Dijo y fue a la cosina, perdiéndose de mi vista. Su departamento... Estaba algo... Bastante desordenado para ser el de una chica soltera. Había montones de ropa amontonados sobre el sofá y una que otra prenda tirada por el piso, para mí mala suerte no había señal de ropa interior por ahí.
Decidí mejor explorar el departamento, o bueno la sala. Habían algunos libros, revistas, unas velas aromáticas de fresa y algunas fotos enmarcadas. En todas salía ella, y en la mayoría había un castaño de hermosos ojos verdes acompañándola. "¿Quien es el?"
Era un chico bastante... ¿Atractivo? Era raro para mí decirlo. Aparecía con An en casi todas las fotos, aunque la edad de ellos variaba, por lo menos estaba casi seguro de que era el mismo chico, parecía ser un poco mayor que ella, quizá un año.
Me sentía confundido, bien talvez era algún familiar pero... También las familias ricas suelen comprometer a sus integrantes desde jóvenes...
— Te hablo luego. — se escuchó por el pasillo que dividía la sala y cosina.
— Lo siento, pero ya volví.
— Está bien, no te preocupes.
— Esto, será mejor que empecemos con el trabajo.
— Si. — Voltee una última vez a ver aquellas fotos, y a aquel lindo castaño.
Onodera Ritsu:
Acababa de terminar la llamada con An, estos días habíamos acostumbrado estar llamandonos para contarnos lo que había sucedido en el día. Pero ahora no tenía tiempo, Takano y yo teníamos que hacer un trabajo, pedazo de idiota, Si hubiera sabido que planeaba esto mejor ni habría la boca.
•••
Estábamos en la sala, Takano no había dicho palabra desde hace un rato, realmente me parecía extraño, creía que solo había ido a la casa de An a tratar de ligar con ella.
— Takano ¿Estás bien?
— Eh... Si, solo estaba pensando.
— ... — ambos guardamos silencio.
— ¿Quien te llamo? — Takano rompió el silencio.
— Oh, mi hermana, tenemos la costumbre de llamarnos cada noche.
— Ya veo... ¿Tu familia es muy grande?
— ¿Eh? No, de hecho solo somos nosotros dos y mis padres. ¿Y la suya Takano?
— No lo se, mis padres se divorciaron e icieron familias propias, así que talvez aunque de una forma extraña.
— Y-y-ya veo... Esto... lo siento.
— No te preocupes, no es algo que me afecte, por lo menos no ahora.
•••
Era tarde, el relog del cuarto marcaba las 2:08, así que decidimos terminar otro día.
Acompañe a Takano a la salida.— Buenas noches Takano.
— Buenas noches... — guardo silencio, talvez pensando en preguntar algo. — An ¿estás comprometida? — dijo finalmente.
Me quedé callado, analizado su pregunta.
— No — conteste. — Bueno, la verdad hace tiempo lo estaba.
— ¿En serio?
— Pero rompí mi compromiso.
— Ya veo...
— ¿Estaba preocupado por eso? — pregunté con la intención de molestarlo como el lo hacía conmigo.
— ¿Estás jugando conmigo?
— Esto...
— Si... — me besó en la frente. — Nos vemos mañana An. — Se alejó lentamente...
¿Que me pasa? ¿Porque mi corazón late tan rápido?
— ¿Takano? — corrí tratando de alcanzarlo... "Mi vista... Se está nublado..." —
—¡Takano yo...!
Bien, mi última actualización antes de entrar a la escuela :,v
Suerte de vuelta a la escuela :,3Ya vieron el spoiler del nuevo manga de Sekaiichi?!! Esta genial!!!
Me quedé así :0
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Otra persona
Fiksi PenggemarAn Onodera, es la hermana menor de Ritsu Onodera, ambos viven en ciudades distintas, Ritsu encargándose de la compañía de su padre y An en otra ciudad, trabajando en una editorial, una vida rutinaria para ambos, hasta que un día inexplicablemente te...