Cuando el mundo comienza a desmoronarse poco a poco, hasta caer a cachos ¿Qué es lo que se puede hacer por sobrevivir? sin moral, sin reglas, solo animales en busca de vida.
"Te estoy siguiendo de cerca Collins- ponía con esa letra amontonada lige...
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Un estruendo se habia adueñado de la sala y de mis capacidades, haciéndome titubear unos segundos aturdida antes de lanzarme contra el escenario para huir de la bestia que me seguía con egoísmo intentando alejarme de sus compañeros para no tener que compartir mi carne con nadie.
-¡Es Harry!- gritó con emoción Paddy con la cara cubierta de sangre coagulada ajena a su organismo-.
Fue cuestión de segundos para que les bestias se retorcieran en el suelo, arrastrándose contra el suelo y las paredes, se querían ir pero su deseo por atraparme era más fuerte que sus instintos.
-¡Debemos distraerlos hasta que Edrei llegue!- grito Tom quien peleaba mis batallas al verme en trance, cansado, con la cara sudorosa y el cabello alborotado y húmedo en sangre y sudor- ¡Eris!- grito antes de lanzar su arma contra mí, contra la bestia de tres patas que corría hacia a mí atizandole el arma hasta atravesarle el cuello y dejándose completamente indefenso-.
-Thomas- susurre al verlo huir ágilmente de los dientes amarillentos, viscosos y sangrientos de uno de ellos, que se abalanzo de manera inmediata encima suyo, siendo solo detenido por su piel apoyado en su viscoso pectoral en busca de su cuchillo- ¡Thomas!- le grite sin embargo pareció que me grite su nombre a mi misma, en un acto irónico por activar mis sentidos-.
En una pelea por demostrar quien era más salvaje, quien era mas bestia corrí sacando de golpe la arma de Tom, haciéndome con los dos ferrer, el escenario era mío y yo salía de el en un salto preciso para clavar un ferrer en la cabeza de una de las bestias que escatimo en esfuerzos intentando tomarme con sus dedos rotos de la camiseta.
Me desconocía a mí misma corriendo hacia la pelea cuando toda la vida huí de ella
Me desconocía con tanta fuerza
Desconocía mis manos y mis piernas llevando por el suelo hacia el castaño que seguía en su lucha
Desconocía al castaño
Pero no desconocía mis deseos de salvarlo
Peleé como si me fuera a morir, porque al final lo haría
-¡Estoy harta de todos ustedes!- grité con rabia pura llegando hasta el castaño clavando mi arma en sus omoplatos cuyo vapor no tardó de salir de ellos mientras soltaba un gruñido adolorido rozando su cara y sus dientes contra Thomas-¡Cierra la maldita boca!- grite apoyando todo mi peso y mi impulso sobre el arma, girando sobre mi misma para clavar el ferrer sobre la boca de otro, dejando salir las chispas a mi disposición en una danza casi perfecta ya no le pertenecían a la barra metálica, no le pertenecían al ferrer, me pertenecían a mi-.
-¡Maldición!- se quejó Tom desde abajo del cadáver con una mueca asqueada al sentir la sangre y parte de la piel quemada de la bestia caer sobre su hombro- es asqueroso-finalizó antes de empujar el pesado cadáver con asco mirando su camiseta sucia en un intento por aguantarse las ganas de vomitar-.
