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Narra Katsuki

A comienzos del verano fue cuando conocí a esa niñata.

Parecía la líder de su pandilla de niñas. Todas eran chicas estúpidas.

Y no nos dejaban ni acercarnos a la caseta.

Intentamos muchísimas cosas, pero esa maldita predecía todos nuestros ataques.
Cualquier intento era más inútil que Deku.

Pero un día decidí ir solo.
Resulta que es más fácil localizar a varios chicos que solo a uno.

Conseguí llegar a las escaleras, y en el momento en el que puse un pie en ellas, comprendí que era una trampa.

Me lanzaron una red y me subieron a la caseta.

Obviamente, yo era más fuerte que ellas, pero me quedé quieto, para poder atacar desde dentro.

Me subieron y me tiraron al suelo, las muy tontas.

Y allí estaba ella.

Sentada en una especie de trono de cojines.

Y con una estúpida corona de princesita en la cabeza.

Le faltaba el cetro para superar el récord de la persona más patética del mundo.

- ¿Cómo te llamas, estúpido bobo?

Y me enfadé.
Me liberé de la red y fui a por ella.

Pero la muy jodida me lanzó un cojín a la cara.

- Te he hecho una pregunta. Eres nuestro prisionero, responde.

- Me llamo Bakugou Katsuki - le gruñí.

- El bebé llorón peliverde te llama Kacchan. Te llamaré...

Empezó a pensárselo, como si ella se creyese importante.
Por favor.
Y, por fin, a la estúpida se le ocurrió ago.

Me miró con maldad.

- Te llamaré Bakacchan.

Volví a correr hacia ella, dispuesto a hacerle daño.

Pero ella sacó una pistola de agua y me mojó entero.

-¡¡ESTÚPIDA!! ¡TE MATARÉ!

Pero ella solo se rió de mí en mi cara.
De la nada, las otras niñas me cogieron y me ataron de pies y manos.

LAS MUY ENDIABLADAS LO TENÍAN PLANEADO.

- Deberías cuidar tu lenguaje, Bakacchan. A los animales como tú hay que domesticarlos, y no me gustaría tener que castigarte.

Dicho esto, me quitaron la camiseta y me empaparon con globos de agua.

- Las mataré - le juré.

- No si yo te mato antes a ti - me dijo.

Me bajaron y me dejaron lejos de su caseta, empapado, con la camiseta mojada y amarrado.

Esa niñata era la maldita hija del diablo.

Al final, me encontró el estúpido de Deku.

Y entonces, el juego cambió.

Ya no iba a por la caseta.

Mi objetivo se volvió llevármela yo a ella.

Destinos Entrecruzados (Bakugo Katsuki y tu) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora