Sólo la azotea y el frío nocturno atestiguaban su no tan pequeña riña. Siempre con la misma premisa, siempre las mismas palabras y siempre la misma atmósfera que ya avecinaba un resultado desfavorable para ambos.
-¡Pues se veía que lo disfrutabas! –Jon reclamó alzando la voz. Desvió su mirada apretando sus labios-.
-¿Estás escuchando lo que dices? –Damian inquirió molesto, sin reflejar la contrariedad en la voz calmada que conservaba-.
-¡Sé lo que vi!
-Pues no viste bien... Sólo estaba agradeciéndome; la salvé de morir quemada... Y sólo fue un beso en la mejilla. ¡Además, era una mujer casada; su esposo la recibió alegremente cuando llegamos al suelo!
-¡No es la primera vez que pasa! ¡Siempre están besándote, abrazándote, colgándose de ti! ¡Y no te molesta!
-¡Sólo hago mi trabajo! ¡Salvarlos es lo que hacemos! ¡¿Qué quieres que haga, que los ignore?!
-¡Por supuesto que no! ¡Sólo deja de ser cariñoso con todos a los que salvas! ¡O no me digas que los ayudas para que te traten así!
-¡¿Qué?! ¡Eso es lo más insensato que has dicho últimamente! ¡Yo no les pido que sean así conmigo y no soy quien para decirles que no lo hagan!
-¡Eso es porque te gusta!
-No se trata de que me agrade o que me desagrade... Yo no hago nada malo y tú estás exagerando ¡como siempre!
-¡Dime la verdad! ¡Yo no soy suficiente, ¿cierto?!
-¡¿Qué?! ¡¿Y eso qué tiene que ver?!
-¡No me mientas! ¡No te gusto! –Jon volvió a levantar su voz-.
-¡Jon, ya basta! ¡Nada de esto tiene que ver con lo nuestro! –Damian ordenó avanzando hacia el menor, quien retrocedió a punto de llorar-.
-¡Ya estoy harto, Damian! –El ojiazul expresó cruzándose de brazos-.
-¿Harto? ¿De qué?
-Tú... tú nunca cambiarás... Nunca me querrás como yo te quiero...
-¿Jon? ¿De qué hablas? Yo sí te quiero... -Damian respondió dando un par de pasos hacia Superboy-.
-¡Pero no como yo lo hago! ¡Jamás me lo demuestras, siempre está nuestro patrullaje antes que yo! ¡Nunca me das muestras de afecto...! ¡Siempre soy yo quien te pide un beso! ¡E incluso pienso que te molesto!
-Jon, eso no es cierto...
-¡Sí lo es! ¡Y lo peor es que esas chicas, chicos y otras personas, cuando te demuestran su "agradecimiento", tú te alegras y lo disfrutas! ¡Pero cuando se trata de mí, me rechazas!
-¡No es cierto! –Damian refutó tomando las manos de Jon-. ¡¿Por qué tienes que ver las cosas así todo el tiempo?! ¡Ya basta con eso! ¡Y deja de dudar de mis sentimientos, yo sí te quiero!
-¡Pues no te creo!
-¡Pero es la verdad!
-¡En todo este tiempo que llevamos saliendo no me has dicho ni una sola vez que te gusto o que me quieres!
-¡Te lo estoy diciendo ahora!
-¡Porque no tienes opción! ¡Jamás has sido cariñoso conmigo, ni me... me...! ¡Sabes a lo que me refiero! –El sonrojo en las mejillas de Jon le impidieron continuar. Hizo soltar sus manos y se dio media vuelta-.

ESTÁS LEYENDO
BABYMON
FanfictionLuego de un "desafortunado" golpe en la cabeza, Damian cree que es un niñito pequeño que sólo piensa en jugar, comer y dormir. Sin embargo, esto representa uno de los más grandes desafíos que los batbrothers hayan enfrentado, pues no tienen ni la má...