Capítulo 15: Butterfly

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Nos dirigimos a la recepción del hospital luego de entrar, Vale pidió permiso para poder ver a la paciente

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Nos dirigimos a la recepción del hospital luego de entrar, Vale pidió permiso para poder ver a la paciente. Mí corazón sé sentía oprimido.

- Es por aquí - dijo ella, una vez le permitieron su entrada.

La seguí, no pensaba dejarla sola, además quería conocer a la hermosa niña que lamentablemente nos dejaría.

Llegamos a la habitación 235, dónde tenía una targuetilla con el nombre de Amanda Dallas.

Valeria dio unos pequeños golpecitos en la puerta y está fue abierta por una señora mayor qué nosotros, sentí pena al verla con los ojos llorozos e hinchados, llevaba con ella un osito de pelpa.

(inglés) - Doctora pase - le dijo la señora, entramos a la habitación y dirigí mí vista a la pequeña niña qué sé encontraba en la camilla, estaba muy pálida pero feliz.

- Lamento venir tarde, el tráfico es complicado ha estás horas - sé justifico, la señora hizo un ademán para qué no sé preocupara - he venido con un amigo, SeokJin te presento a la mamá de Amanda, Adriana - le di una pequeña sonrisa y la saludé.

- Mucho gusto señora, espero no le moleste qué este aquí - le dije, mí inglés no era muy bueno después de todo.

- No es ninguna molestia - sé dirigió a Vale - Doctora, Amanda quería verla pero sé ha dormido, sé siente débil y yo ya no quiero qué sufra más - su voz sé quebró.

- Tranquila, pronto descansará, ella dejará de sufrir - le dijo tristemente mí chica.

- Iré a la cafetería por un café, quiero tomar un poco de aire - dejó el peluche a lado de Amanda - ¿Quiere qué le traiga uno? - ofreció.

- Sí no es mucha molestia - la señora negó y pronto nos dejó solos, Valeria suspiró acercándose a la pequeña, le acarició su pequeño rostro.

Me fui al otro extremo para poder platicar con ella.

(coreano) - Tiene cáncer estomacal - comentó sin verme - cuándo sé lo detectaron era muy tarde, ya estaba en etapa terminal - su labio tembló.

- Lo lamento - fue lo único qué pude decir, no sabía qué comentar, soy bueno para dar apoyo pero ahorita tenía mí mente cerrada.

- Merecía vivir más, crecer, conocer y ser feliz - agarró su mano y le dio un besos en ella - es una niña tan dulce, me encariñé rápido con ella cuándo la atendía, siempre me llevaba dulces en cada consulta, tan linda - sonrió para soltar un pequeña lagrima.

- Estará bien, todos tenemos un período de vida y ella ya llegó al suyo - le dije - todos venimos al mundo con una misión y nos vamos cuándo la cumplimos y yo creo qué ella lo hizo - le limpié su lagrima.

Nuestro Sexy Secreto (BTS) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora