Todo inicia cuando Alondra contacta a sus mejores amigas para que protagonicen el MV de BTS
"Waste it on Me"
Cuándo sus amigas conozcan a los siete miembros de la banda, se desarrollará una historia llena de un extraño amor pero siempre juntas.
Es...
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Narra Valeria:
-Bienvenida a mí humilde habitación - JA de humilde no tenía nada, era muy grande, más qué mí habitación, todo estaba perfectamente acomodado, estaba muy bonito todo.
Después de la guerra de comida ocasionada por J-hope, y terminada por el manager de bighit, Jin me trajó a su habitación, para prestarme una playera suya, la mía estaba muy batida y mí cabello parecía una selva.
La habitación de Jin es enorme, tenía una bella cama de sábanas celestes, una gran ventana, su closet en lugar de ser pared era closet, tenía unos sillones negros, un escritorio, en la esquina del closet un espejo de cuerpo completo, todo era increíble y muy pero muy costoso.
-Te prestaré una sudadera mía, no tarda en caer la noche y bajará la temperatura - dijo Jin amablemente, sé dirigió a su closet, buscando una sudadera - toma está, te quedará perfecta - me tendió una sudadera rosa, como las qué él usa.
- Gracias - le dí una pequeña sonrisa - ¿No me prestas un pantalón?, como veras el mío está muy batido - le dije observando mis pantalones, mañana iría por ropa.
- Sí, voy a buscarlo - cuando sé volteó, rápidamente me quité mí blusa sucia y me puse la sudadera rosa, pero olvidé qué tenía que limpiarme bien, o mancharia la sudadera, maldije internamente.
Idiota.
Quisé quitarme la sudadera pero sé atascó con el broche de mí brasier y no podía quitarlo, así que me rendí, no quería romper el suéter de Jin, lo malo era qué estaba en una habitación sola con Jin, medio desnuda, con mis brazos alzados por el sueter, no lograba ver bien, ya qué el suéter lo tenia en la parte de arriba.
- Jin no voltees, pero sé me atascó el suéter con el broche de mí brasier, ¿podrías cerrar los ojos y ayudarme? - le dije, podía mirar algo a través del suéter, vi a Jin de espalda.
- Te voy a ayudar pero disculpa sí te lastimó, tendré mis ojos cerrados - dijo él, yo sólo solté un sonido de aceptación, vi a través del suéter qué Jin se volteaba con los ojos cerrados pero luego los abría y su mirada recorría mí cuerpo, sentí deseo, su mirada sé oscureció.
- Tienes los ojos cerrados ¿verdad? - pregunté con la esperanza de qué los volviera a cerrar.
- Sí, los tengo bien cerrados - ¡MENTIRA! los tenía bien abiertos, él sé acercó a mí y sus dedos recorrieron mí espalda baja, sentí un escalofrío y algo de cosquillas.
- ¡Ay! - fue lo único qué dije, sacudiendo me un poco
- Perdón, no sé lo qué hago - dijo fingiendo inocencia y sin apartar las manos de mí espalda.
Poco a poco subió sus manos al broche, la suavidad de sus dedos era increíble, me estaba matando, quería soltar un pequeño gemido pero no lo hice, mordí mis labios, sabía qué estaba mal pero se sentía tan bien.
