Entre pasillos [Yoonmin]

Viernes 7:30 - La biblioteca

Seokjin se había decidido a perseguir a Yoongi durante toda la mañana. Incluso pasó a buscarlo por su casa. Él no quería ir a la escuela, y lo notaba distante. Algo le había ocurrido, y como le había prometido a Jimin horas antes, cuando llamó a su casa para investigar por qué no recibía sus mensajes, debía ayudar para averiguar de qué se trataba. Claro que la misión se complicó cuando ellos se encontraron. En ese momento, creyó que era mejor mirar para otro lado, luego averiguaría qué estaba pasando. Por el momento, dejaría que Jimin se encargara.

Yoongi vio la preocupación reflejada en los ojos de su compañero y se sintió culpable por haber sido quien se la había provocado.

– ¿Qué pasa, Min? –Preguntó Park, casi seguro de que obtendría una buena respuesta después de la tarde entretenida del día anterior.

– Sólo tuve un mal día. –Le dirigió una sonrisa que no lo convenció. De todos modos, no se quedó allí a esperar su respuesta. Sólo se marchó en otra dirección.

Los otros dos se quedaron mirándolo. Luego intercambiaron miradas. Jimin suspiró. Él solo no conseguiría ayudarlo. Menos en aquellas circunstancias. Sí, habían dejado claro que ninguno de los dos odiaba al otro, pero eso no quería decir que fuesen amigos.

– Necesitamos refuerzos. –Le comentó al mayor, intentando no preocuparse demasiado. Tal vez no le ocurría nada tan grave como ellos creían.

Buscaron al resto del grupo, y los hallaron conversando en una escalera. Claramente, el chico pálido no estaba con ellos.

– ¿Ocurre algo, Jimin? –Le preguntó Namjoon al notar su expresión.

– ¿Yoongi? –Supuso Tae, que a esa altura ya había notado el repentino interés de Park en su compañero de grupo. El otro asintió.

Les explicó a sus amigos la situación. El sorpresivo distanciamiento del chico, su actitud ante la presencia de Sook y la acosadora. El resto de los chicos se asombraron cuando explicó el primer punto; a pesar de la mala actuación del chico pálido, no se habían imaginado siquiera que las cosas no estaban bien entre ellos.

Tras una larga conversación conformada principalmente por teorías y suposiciones, llegaron a la conclusión de que debían organizarse. Durante el día, Namjoon, que compartía más clases con él, intentaría hacerlo hablar. Luego, en la biblioteca, Jimin intentaría entrar en confianza y hacerle algunas preguntas. Y por último, Hoseok trataría de acompañarlo a casa. En realidad, Jimin quería cumplir ese papel, pero no se pudo negar al plan, porque ya había acordado con su compañero que estudiarían juntos en la biblioteca.

~13:10~

En la hora de Biología, los dos chicos se sentaron juntos, con la intención de perfeccionar el afiche que habían empezado a hacer. Cuando terminara la clase, continuarían en la biblioteca, donde habían quedado. El menor evitó sacar el libro infantil, para evitar burlas de sus compañeros. Ese día se vio obligado a llevarlo, así podría devolverlo antes de irse a casa. Por desgracia, sus intentos por ocultarlo fueron en vano, porque accidentalmente una compañera pateó la mochila del chico, haciendo que el libro ilustrado con caricaturas de niños coloridos saliera. Viendo el lado positivo, los únicos que lo vieron fueron dos personas del grupo que estaba a su lado. Volviendo al lado negativo, esas tres personas eran la pareja de amargados, que reían por lo bajo.

– ¿Qué es eso? –Preguntó el chico riendo junto a su novia. Yoongi volteó al detectar la conocida voz del tipo. Frunció el ceño y le susurró a su compañero.

– Son unos idiotas, no los escuches. –Tomó el manual y volvió a ponerlo en su lugar, a salvo de la vista de sus otros compañeros.

– ¿Qué te pasa, Min? ¿Por este dejaste a Sook? –Jimin sintió como él se tensaba a su lado ante las palabras de la otra– Eso sí es caer bajo. –El mayor estaba a punto de responderle cuando el profesor se acercó a ellos.