Capitulo 5: Cambio

4.7K 482 136
                                    

Un nuevo día surgía en la isla, el sol comenzaba a asomar entre los árboles del bosque donde el ruido de las olas golpeando la costa era fuerte, relajante y lograba escucharse hasta la aldea.

Ese día había madrugado para preparar un desayuno puesto que tocaba el entrenamiento con Gobber que aún dormía en la habitación de invitados y no tardaría mucho en despertar debido al olor que comenzaba a emanar de la cocina.

Y efectivamente como casi todos los días que preparaba el desayuno a los pocos minutos de acabar la comida su rubio mentor bajaba las escaleras medio adormilado, atraído por aquel aroma.

Hiccup se había servido un plato para el que ya estaba listo en la mesa, pero decidió dárselo a Gobber para que comiera primero, pues le servía que estuviera de buen humor pues, todo el mundo sabe que un vikingo con el estómago lleno es menos cabeza dura y necesitaba que le contestará ciertas preguntas.

Ya terminado el segundo plato se sentó en la mesa a acompañar al mayor a comer, una cosa que hicieron con normalidad siguiendo la rutina de otros días hasta que Hiccup... Bueno comenzó a ser Hiccup.

- Tío Gobber... ¿Sabes si más información de los Night Fury?

Él noto de inmediato la mirada de sorpresa de su tío, casi podría decirse que se atragantaba con el almuerzo más esto solo siguió en un corto pero muy incómodo silenció.

- Mira chico, esas cosas son muy peligrosas... No sabemos mucho, pero si que si vez uno debés de correr y rezarle a Odín -

Hiccup apretó los labios al obtener tal respuesta, pues fue literalmente lo que el libro decía, aún así volvió a preguntar.

- ¿Y no existe una secuela del libro de dragones o un panfleto de los Night Fury? -

Gobber volvió a hacer un silencio corto pero hablo denuevo con una voz más sería e intimidante.

- Nadie a vivido para contarlo, así que sigue la advertencia del libro -

El muchacho cesó las preguntas después de aquel tema, ya que no quería aquejar más a su tío postizo, por lo que la comida avanzo y finalizo con normalidad, más un leve toque algo amargo se sentía en su plato pues varios pensamientos le aquejaban aún.

La mañana continuó con normalidad pues seguía el entrenamiento, su momento menos favorito del día, aunque solo fuese la segunda clase notaba muy bien que sus congéneres no lo apreciaban mucho, pero mentalmente preparado para cualquier tortura que se le ocurriera a Gobber se preparó para la prueba.

Así que cuando llegaron a la academia, los demás ya estaban esperando las instrucciones del mentor, quien les explico a su manera el desafío, un laberinto en el cual debían de esconderse del dragón del día.

- Los Nadder son rápidos y ágiles de pies, su trabajo es ser mucho más rápidos y ágiles -

Mencionó desde las gradas el profesor rubio a sus pupilos que apenas recogían las armas y escudos para abrir la celda del dragón que trepó las paredes del laberinto buscando a los chicos que reaccionaron rápido y se ocultaron.

Pero los que tardaron en reaccionar fueron los gemelos que erraron una vuelta para terminar cara a cara con el dragón, más un despreocupado Gobber les dijo que todo dragón tiene un punto ciego.

Eso no sirvió de mucho pues los gemelos comenzaron a discutir entre ellos y al final el dragón los atacó, siendo ellos capaces de esquivar el disparo del dragón por mera suerte, más aquello solo hizo que el lado irónico de Gobber se mostrase hablando sarcástico.

- Punto ciego, Si, punto sordo... No exactamente -

Fue lo mencionado por Gobber, que mostraba su lado más común en lugar de ayudar a sus pupilos.

Susurros NocturnosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora