Algo raro tiene JC

CAP 3 JESSIE

Dylan se besó con Karen, no había hablado con él , más bien ni siquiera he hablado mucho con él, pero desde ese tarde en la cafetería, parecía que hubiese llegado alguien a mi vida, un ángel, si eso parecía, pero no lo es, ahora lo sé, él no es un ángel, él me va a destruir más, él no es quien me va ayudar, él no me va a soportar no va a hacer capaz de lidiar con mis cicatrices, con mis crisis, va a huir, va alejarse de mí, eso lo sé, ningún chico es capaz de lidiar con todos mis demonios, soy tan bipolar, porque a veces quisiera sonreír, y otras quisiera dormir, pero dormir y no despertar, porque sería la única forma en la que estaría tranquila, y en las que mis padres me perdonarían por todo el daño que les he causado.

La situación en casa era frustrante, mis padres ocupados con Lisa, ella es mi hermana tiene 2 años, es una niña hermosa, mi abuela tratando de animarme todo el tiempo. Pero en casa no faltaban un día los gritos, las lágrimas, las suplicas, los sollozos…

—Mamá—dije, con un tono bajo. Ella no me miraba, estaba sentada frente a ella tenía su computadora y parecía muy ocupada.
—Mamá, escúchame por favor —dije casi suplicando, ella no lo hizo se paró y se fue, me dejo sola, otra vez sola,  me quede hay parada inmovilizada, cuando sentí unos brazos en mis hombros, era mi abuela. 
—Lo siento Jessie—dijo en tono de disculpa.
—Yo lo siento más—dije, tenía lagrima contenidas—¿Dónde esta Lisa?—pregunte.
—Esta con Brad—dijo y me miro— .Jessie, no has pensado que quizás deberías de retomar tus actividades—dijo y sonrió.
—¿Mis actividades?—dije y fruncí el ceño.
—Si Jessie lo que hacías antes, bueno antes de todo esto—dijo triste—,comenzar a nadar de nuevo.
—¿Nadar de nuevo? —dije sorprendida.
—Si Jessie ¿porque no? —Dijo y me miro.
—Porque yo ya no puede ser la misma de antes, no hare lo que hacía antes—dije.
—¿Porque no?, Jessie inténtalo, hagamos algo, inténtalo y si no funciona, no lo hagas—dijo y sonrió, parecía estar convenciéndome, porque mi abuela es así.
—Abuela porque eres así—dije y le sonreí—.Está bien, pero si no funciona, no vuelves a hablarme nunca jamás de natación ni de nada de lo que hacía antes —acepte y fruncí el ceño.
—Gracias Jessie,en la universidad hay prácticas para que entres Jessie, el lunes debes de ir y hacerlo¿ lo harás? ¿Cierto? —Dijo y sonreía.
—Cálmate abuela te lo prometí, lo hare, el lunes si está bien —dije y sonreí, no sé en que momento pero estaba envuelta en sus brazos, me tenía abrazada.
—Quiero ver a Lisa —dije después que me termino de abrazar.
—Anda, tu mamá y tu papá están en la oficina—dijo y sonrió.

—Jessie—dijo Brad y sonrio.
—¿Puedo estar aquí? —pregunte.
—Claro, ven—dijo para que me sentara en el césped.
Me senté, Brad estaba jugando con Lisa, ella no hablaba muy bien aún, pero su sonrisa, era muy hermosa.
—Es hermosa —dije y sonreí.
—Lo es ,Jessie, es nuestra hermana—dijo un tono más bajo.
—Brad, Lisa es mi…—dije y fui interrumpida.
—Jessie, cállate—dijo y me miro había tristeza en su mirada—.Cállate ¿por qué siempre eres así?, ¿por qué te encaprichas en dañar todos los momentos felices de esta familia? —dijo firme.
—Cállate Brad, tú no sabes nada, no me puedes culpar a mí de arruinar los momentos felices, cuando en mi vida no hay esos momentos, no los hay­—dije casi gritando—.Mi vida la arruinaron Brad, no puedo ver las cosas como tú las ves, y como quisiera verlas, no puedo­—dije y las lágrimas invadieron mi rostro y me fui.

                                                                                                                                                                               
Si hay algo que me mataba era pelearme con Brad, él es mi hermano, la persona que siempre ha estado hay para mí, y ahora que él me esté culpando de arruinar su felicidad. 
Su felicidad es irónico, pero su felicidad ya no existe desde que paso todo esto, la vida de mis padres, de Brad, de mi abuela y la mía cambio. Ninguno supo cómo enfrentarse a la situación, todos parecían a ver visto un monstruo y esconderse, no darle la cara, buscar soluciones cuando ni siquiera sabíamos qué diablos había pasado.
¿Qué debería de hacer una joven de mi edad? Esa era la pregunta que en mi mente cruzaba la mayoría de las veces, desde que cambie la forma de ver las cosas. Salir disfrutar de la vida, vivir cada minuto de la vida, pero yo no podía hacer eso en mi vida. Había un dolor muy grande en mi vida como para olvidar en un abrir y cerrar de ojos todo lo que viví. El Dr. Landau me dice  —no será fácil Jessie— y aun recuerdos sus palabras cuando lo conocí y cuando pensé que ir a un consultorio psicológico era una estupidez pero fue el mejor consuelo, si no hubiera ido en donde me hubiese refugiado. Pero aquí estoy otra vez llorando, llorando por mí, por mi pasado, por lo que mi pasado me hizo, me destruyo, me hizo esto una persona totalmente vulnerable. 

 —Jessie baja a cenar—dijo mi abuela.
—No tengo hambre—conteste por el otro lado .
—Jessie ¿qué te pasa?—dijo preocupada.
—Nada abuela, solo quiero dormir—dije, para que se quedara tranquila.
—Jessie, abre la puerta—dijo más preocupada, abrí la puerta.
—¿Qué tienes? —pregunto y fruncio el ceño.
—Lo siento—dije, con la voz baja.
—No tienes hambre—dijo y me miro.
—No —dije.
—¿Por qué?—dijo con la voz cálida.
—Porque, no lo sé, solo quiero dormir—dije.
—Me preocupaste—confeso.
—Lo siento —dije y sonreí.
—¿Quieres hablar con el Dr.Landau ?—pregunto.
—No, quizás mañana, ahora no—dije.
—Está bien, duerme bien —dijo y me sonrió cálidamente y se marcho.

     ****                                                                                             

—NO…Nooo… auxilio, nooo por favor nooooo—grite—.Fue una pesadilla, lo fue—dije entre lágrimas. Brad estaba abrazándome no se en que momento había entrado solo sé que me sentía bien, no importa lo que paso él estaba aqui. 
—Cálmate Jessie—dijo sereno.
—Brad no me dejes por favor —dije entre sollozos.
—Nunca Jessie, nunca, siento haberte dicho esta tarde todo eso, lo siento hermana—dijo triste.
—Yo también lo siento Brad, pero aquí estás conmigo, aguantando a la tonta de tu hermana con crisis y todo—dije y lo mire.
—No digas eso, tus crisis no son un problema, es una batalla constante contigo misma—murmuro. 
—Lo sé, Brad gracias—dije , más calmada.
—Duerme, Jessie lo necesitas—dijo.