#6 Hola paciente.

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-La cucaracha saltó y a Cassandra atacó,  la pobre cucaracha se asustó y mi novia la mató- termina Luca con la canción y yo rio a carcajadas. Mi amiga lo fulmina con la mirada.

-Me dan asco las cucarachas Luca- dice cruzada de brazos.

-Vamos Cassandra- hablo riendo-¿Qué puede hacerte una cucaracha?

-Dar asco, ensuciar mi linda y limpia piel.

Ya es fin de semana, Luca y Cass están en la casa de mis padres junto conmigo y Zatch, organizamos una cena, Oliver nos dijo que no, claro que los chicos hablaron con él. Luca está atento a  su celular, sé que debe estar pensando en su amigo y su aburrimiento. Por más molesta que esté con Oliver no puedo dejar que se aburra. Asi que tomo coraje  y le marco, salgo de la sala y voy al jardín, no, mejor aún...iré a su casa. Entro y tomo las llaves del auto de Zatch.

-Enseguida vuelvo.

Me apresuro a salir, subo al coche y emprendo viaje a su casa. Debo apoyar a Oliver fisica y emocionalmente. Él es mi paciente, como cualquier otro y está en mi deber de doctora ayudarlo. Sé que es un gran idiota pero es un hombre sufrido, con una triste vida, que si él está dispuesto, puede cambiarla. Llego a su casa, salgo del coche y me detengo antes de golpear, tomo una bocada de aire y con mis nudillos doy tres golpes en la puerta. Ansiosa espero a que me atiendan, la puerta se abre y veo a la señora Traynor.

-Hola señora- ella sonríe y me da un abrazo.

-Hola Emily. Pasa querida- me hace seña para que entre y asi lo hago.

-¿Está Oliver en casa?- ella asiente emocionada.

-Sí, está en su habitación. - asiento- Ve.

-Gracias.

Camino hasta su cuarto y la puerta está entre abierta, como la chusma que soy, me quedo callada observando a Oliver quien mira por el gran ventanal y luego suspira. Mi corazón se encoje, debe ser muy difícil estar en su lugar. Tomada de valor y animada para hacer lo que tengo pensado, toco su puerta.

-Adelante- habla, dibujo una sincera sonrisa y entro.

-Hola paciente- sonrío más y él está serio.

-Hola doctora... Por lo que tengo entendido, este no es su horario de trabajo.

-¿Quién dice que es por trabajo? - me encojo de hombros y me siento en uno de los sillones.

-¿Y por qué es entonces señorita Evans?

-Haré una cena en mi casa hoy, su amigo está allá y yo vine a invitarlo a usted.

-Su insoportable paciente.

-Bueno no voy a negar que lo eres pero- sonrío-  Vengo a invitarte a ti como mi vecino. Además escuche por ahí que un buen momento con amigos es una gran terapia- sonrío haciendome la desentendida.

-No quiero gracias.

-¿Por qué? - sonríe irónico.

-¿Por qué?  Porque no quiero.

-Ohh ya entiendo- me levanto y me dirijo a la puerta haciendole creer que me iría pero no, ese no es mi estilo- Sí irás porque sí lo quieres. El hecho de estar en una silla de ruedas no significa que no puedas ganarme en el monopolio- agarro su silla y lo saco de la habitación-  Aunque eso es un decir porque nadie me gana en el monopolio.

-Emily Evans no quiero ir- habla serio y enojado.

-Sí quieres Oliver, me he cansado de escuchar a mis pacientes decir que les gustaría estar con sus amigos pero no quieren molestarlos.

Quédate a mi lado©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora