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 Sin dudarlo un minuto, tomé el brazo de Niall y corrí a la salida, pues si la chica ya llegó a su salón, ya todos lo vieron y lo peor que podría pasar ahora es que intentemos defendernos. 

-Estamos mal- dijo Niall y yo negué una vez que llegamos a la salida. Caminamos al apartamento que estaba cerca y al entrar, pude ver que estaban todas las ventanas tapadas.

-Esto no puede ir mejor- dije sarcásticamente mientras Niall tomaba jugo de una botella.

-No puedo creer como las chicas se ponen a pensar en esas cosas cuando la mitad de su país se destruye- dijo sin creerlo- Hey ¿A qué se refería Blackly con lo que hiciste anoche? No hablamos del tema y todavía me pregunto ¿Por qué estabas en una comisaría?- preguntó y me quede callada sin saber que decir.

-Ah…- emití y me interrogó con la mirada entonces no lo resistí y hablé- fui a una fiesta- dije y enseguida su rostro se transformó en seriedad pura. Una seriedad anti-Niall.

-Oh, no te molestes en decirme-dijo tranquilo lo que me sorprendió bastante.

-¿No te enfadarás?- pregunté y me fulminó con la mirada.

-Claro que si- dijo firme- Me mentiste.

-Es que tenía que…- hablé en mi defensa.

-¿A mí?- se señaló a sí mismo- ¿Mentirme? Por favor, me mientes y de seguro te embriagaste y anduviste con muchos chicos… ¿por qué?-preguntó y rodé mis ojos.

-Fue una fiesta del Oeste y el Este, gente de ambos lugares convivían juntos, sin diferencia- dije desafiándolo con la mirada.

-¿Así como hacemos tu y yo?- preguntó- convivir juntos, apoyarse el uno al otro sin diferencia alguno y ahora ¿Me mientes? ¿Por qué no me dijiste y también iba yo?- dijo y me encogí de hombros.

-Porque me dijeron que nadie podía saberlo… Fui con Herb y con Harry- dije y sus cejas se alzaron aún más.

-No sigas porque duele cada vez más- dijo sentándose en una silla- ¿Tomaste?- preguntó y asentí.

-Un poco, pero nunca más pasará- dije y suspiró cansado- Pero note algo en ese lugar; todos estaban unidos, estoy segura que si nos juntamos todos podemos hacerle ver a Blackly que…- comencé a decir.

-Los matará a todos- dijo rápidamente y se levantó de su asiento- Debes seguir entrenando- dijo firme y suspiré cansada.

Pasamos la tarde entre patadas, bofetones de mi parte y risas de Niall ya que le daba gracia lo que me molestaba pero no me importaba del todo. Luego de tanto rato de peleas, ataques sorpresivos de Niall y golpes a una almohada, pude por una vez ducharme y dormirme ya que no tenía energías para nada más.
Al día siguiente, me levanté junto con Niall toda adolorida, pude ver que Niall en su mejilla tenía un par de moretones pero casi invisibles. Al ir al baño, me miré al espejo y pude ver que todos mis brazos estaban llenos de moratones.

-Maldición- dije para mí y me lavé los dientes ignorándolo nada.
AL salir del baño, estaba Niall desayunando con su camisa abierta y su cabello despeinado.

-No puedo con la vida- dijo con su rostro dentro de la taza y yo reí.

-Pensaran que me pegas- dije mostrándole los moratones y negó.

-Nadie los verá- afirmó- Te pondrás ropa larga- dijo y asentí.
Cuando salimos al instituto, esa mañana teníamos clase a primera hora juntos así que intentamos de llegar tarde como siempre y así fue.
Desde que me senté en el pupitre noté que algo andaba raro con ese día, no solo porque las chicas se reían como idiotas o me fulminaban con la mirada al verme ya que de seguro todas vieron el video. Pude ver a la chica que nos grabó sentada en el otro lado del salón y la fulminaba con la mirada.

-Chicas- llamó la atención Niall y todas miraron con una risa tonta, a punto de soltarlo todo- Hoy daremos la guerra civil en Estados Unidos- dijo y comenzó a copiar cosas en el pizarrón mientras que a mí, las chicas me miraban con asco o me lanzaban notas con dibujos morbosos. Miré a Flee sentada delante dándome la espalda y ni me miró, ni intento defenderme.

Enseguida que sonó el timbre, caminé a su pupitre pero ella se fue antes de que llegue entonces me quede con las palabras en la boca; de seguro me odia.

-Hey tu- me llamó la chica que me grabo con Niall y salí del salón molesta ya que no quería hablar con nadie. Tomé el camino al baño pero esta idiota me siguió.

-Zorra- me gritó- Te llamé- dijo y me detuve.

-¿Qué quieres imbécil?- le pregunté molesta y se sorprendió.

-Y dime ¿Cuánto tuviste que hacer para tener que hacerlo con tu hermano?- preguntó y muy molesta caminé hacia a ella.

-No te metas en donde no te llaman- dije casi que escupiendo las palabras y ella me desafió con la mirada.

-Hago lo que quiero- dijo desafiándome alzando una ceja y muy molesta, la tomé del cuello y la empuje contra un casillero. Repitiendo las cosas que Niall me enseño el día anterior, le golpeé la panza, las piernas le jalé del cabello- ¡Suéltame que me duele!- gritaba mientras yo jalaba su cabello y ella intentaba golpearme a mí.

-¡Llamen a un profesor!- gritó una de las chicas y en eso pero yo me separé de ella.

-¡No sabes en lo que te acabas de meter imbécil!- me gritó parada contra el casillero y enseguida retomé lo que estaba pasando. Acabo de lastimar a alguien.
Enseguida que quedé en shok, llegó un profesor que me tomó del brazo (lo cual me dolió) y me llevó a la dirección donde estaba Blackly.
Su secretaria o como yo la llamo MissPuta, estaban viendo un video en un teléfono y al yo sentarme frente a él no dijo anda, solo me sonrió.

-Señorita Horan- dijo y tomó el teléfono- O Waverby debería decir- dijo y me mostro la pantalla; era Niall llamándome “Casey” antes de que me acorrale contra ese casillero.

-Estúpido Niall con sus estúpidas hormonas- dijo en un susurro rodando mis ojos.

-Te vez muy mal como para ser una hereditaria de ese apellido- dijo firme y yo miré al suelo.

-¿Dónde está Niall?- pregunté y rió en una fuerte carcajada.

-No te preocupes por él- dijo y le dio una indicación a su secretaria quien abrió la puerta y dejo pasar a la chica que recién estaba golpeando- Ahora, señorita Waverby- dijo abriendo un cajón y sacó de allí un arma con la cual me apunto- La vida está llena de enemigos que te arruinan y te dejan mal parado- dijo moviendo la punta del arma delante de mi poniéndome nerviosa- Pero también existen las opciones ¿No es así?- asentí- Puedes escoger ser una buena persona… O no- dijo curiosamente- Pero que casualidad que las buenas personas siempre terminan lastimadas- dijo y me tendió el arma para que la tomé- Tú decides si ser una buena persona o… Justa podríamos decir- dijo señalando a mi compañera con el arma. Sin dudarlo, la tomé y la miré, apunté a Blackly pero solo rió.

-¿Por qué me la diste?- pregunté y me sonrió.

-Porque piensa que es por la culpa de ella por la que yo me enteré de tu mentirita, es ella la que te humillo a ti y a tu… Lo que sea tuyo…- dijo y si lo pensaba de esa forma, era verdad así que la apunté a ella. Su odioso rostro. Era verdad, por culpa de ella estamos sometidas a esto las dos- Vamos, dispárale y demuéstrale que estaba equivocada. Estaba a punto de apretar el gatillo de la furia que tenía pero en eso, lo solté y dejé el arma caer al suelo.

-No puedo, no soy como tu- dije mirando a Blackly- No mato a la gente para deshacerme de ella- dije y apretó sus labios.

-Mala elección- dijo firme y se levantó- Llévenla al sótano con el profesor Horan… Hay unas cosas que me gustaría explicarle al docente- dijo firme y un profesor me tomó por detrás pero yo intenté golpearlo lo que se me hizo difícil ya que me tomó la secretaria y entre los dos, me llevaron por los pasillos bajando escaleras y escaleras hasta entrar en un gran sótano donde estaba Niall.

-No- dijo rápidamente mientras que un hombre lo tomaba por detrás- No, por favor- dijo casi que llorando y mirando a Blackly con desesperación- Por favor- pidió mientras pude sentir el arma de Blackly en mi cabeza pero enseguida la quito y me lanzó al suelo- Por favor…- dijo Niall- Casey…- me llamó- Mírame, estoy aquí… Todo estará bien- me prometió con una firme mirada y yo negué.

-Mátame ahora- le pedí a Blackly.

Diferencias (N.H)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora