-Niall- dije suspirando y miré a un costado.
-Dime- exigió y lo miré decepcionada- Por favor- suplico.
-Debemos irnos de aquí- dije rápidamente.
-¡Casey!- me gritó- ¡Dime!- me exigió.
-Blackly quiere que me acueste con él- dije firme y su rostro se transformó por completo.
-No- dijo firme- No, no, no- me miró- Dime que no lo harás…
-Me prometió detener todo esto- dije y su boca se cayó al suelo sin creerlo.
-¿Me estás hablando en serio?- preguntó confundido y asentí- Dios- dijo mirando al suelo- No me digas que lo consideraste…- dijo.
-Estamos hablando de que tal vez… Sea la solución a todo.
-Estás loca- dijo negando- ¿Qué tienes en la cabeza?- preguntó molesto- Te juro que si ese imbécil te toca siquiera un pelo…- infló sus cachetes antes de seguir- Lo lastimaré mucho…
-Niall…
-Casey- me dijo molesto- No quiero que eso suceda, buscaremos otra forma…- dijo- Pero no esa- habló luego de una pausa. Iba a decir algo más pero en eso, llega una empleada.
-Señorita, el señor Blackly quiere que este en el instituto en media hora- dijo y tragué fuertemente caminando en esa dirección dejando atrás a Niall.
Blackly me tuvo todo el día yendo y viniendo como su secretaria ya que había despedido a la anterior. Estuve ayudándolo hasta que llego el final del día y volvimos en la limo a su gran mansión. Él estaba distante conmigo, no hablaba conmigo, en la cena, se mantuvo callado y solo se escuchaban los cubiertos pero era extraño que haya cenado con él. Mientras estábamos comiendo, me miró por un minuto y suspiró con ternura.
-Casey- me llamó y lo miró- Sé que piensas que soy un monstro- dijo y lo miré con ojos bien abiertos- lo lamento- dijo y se levantó, tomó algo de un mueble y me lo tendió- Este es el periódico que saldrá mañana- dijo y leí el gran titular; un Londres sin fronteras.
-¿Blackly renuncia?- pregunté leyendo el subtitulo y lo miré.
-Me hiciste cambiar de opinión- dijo con una sonrisa y tomó su bolsillo- Renunciaré a esto, venderé esta casa y dedicaré mi vida a ti… Es por eso Casey…- dijo y se arrodilló- Que quiero que te cases conmigo- dijo mostrándome un lujoso anillo mientras yo tapaba mi boca sin creerlo.
-Ah…- dije mirándolo.
-No me importa que estés embarazada de otro hombre- dijo con una sonrisa- Te cuidaré…
-No puedo- dije levantándome y lo miré- Lo siento- dije y en su mirada vi el dolor.
-¿Es por él?- preguntó con ternura un poco molesto y yo cerré mis ojos.
-Simplemente no puedo aceptar… No te amo- dije y se levantó furioso. Caminó hacia mí y me tomó del brazo para guiarme bruscamente a las escaleras hacia el sótano donde allí, estaba Niall moviendo su cabeza.
-Quedate ahí- me dijo soltándome delante de Niall- ¿Es porque lo amas a él?- me preguntó y no contesté- ¡Contestame!- me gritó.
-¡No le hables así!- se metió Niall y Blackly le lanzó una patada en el abdomen seguido de un gemido de dolor de Niall.
-Cállate- dijo con asco y me miró- Dime la verdad idiota- me dijo- ¿no me amas?- preguntó- Dilo de nuevo.
-No te amo- dije rápidamente y miró a Niall con una sonrisa juguetona.
-Si no me tendrás a mi, no lo tendrás a él- dijo en un susurro- ¿Entonces qué era lo que gritabas ayer en mi cama?- preguntó y Niall se alarmó.
-¿Qué? ¿De qué habla?- preguntó Niall.
-“¡Oh, por favor, no te detengas!”- gritó Blackly imitando mi voz.
-Mentira- dije yo mientras Niall me fulminaba con la mirada.
-“Eres mejor que Niall, por favor, no pares”- dijo imitando un orgasmo y yo negué.
-Es mentira, Niall, no lo escuches- dije mientras Niall me fulminaba a mí y a Blackly.
-Por favor cariño- dijo Blackly- No seas mentirosa- dijo- ¿A quién le crees Horan?- preguntó mirándolo a él- ¿A el hombre que fue novio de tu madre o a la chica que te mintió varias veces?- dijo.
-No lo escuches por favor- suplique y Blackly se acercó a mi tomandome del rostro- Yo no soy una mentirosa- le dije y sonrió.
-¿Le comentaste del beso? ¿Nuestra cena? ¿Ayer en la noche?- preguntó y yo me quedé callada- Ah… No le dijiste eso.
-¿De qué habla?- preguntó Niall y Blackly rió- Casey- dijo- Mirame- pidió- Dime que es mentira- no contesté.
-Tenía que- dije y dejo caer su cabeza decepcionado.
-¿Puedes dejarme ir?- preguntó sin siquiera mirarme.
-Niall- dije separándome de Blackly y me agaché delante de él, tomé su rostro pero hacia fuerza para mirar a un costado y me quitaba la mirada de encima.
-Aléjate- pidió y me senté en el suelo frente a él.
-No me acosté con él…- dije y cerró sus ojos.
-¿Puedo irme?- pidió y Blackly, se agachó detrás de Niall, le quitó las cadenas y este, lo único que hizo fue levantarse y caminar a la salida, intenté tomar su mano pero él no hizo nada, solamente siguió de largo. AL principio le costaba un poco caminar pero, se acostumbro antes de salir.
-¿Por qué me haces esto?- le pregunté a Blackly y escuché el sonido de un gatillo entonces miré rápidamente hacia donde estaba él.
-Sé que piensas que soy un inhumano- dijo acariciando el arma- Pero debes saber que tengo corazón, tengo una historia y por algo, soy el monstro que soy…- me miró con lágrimas en los ojos- Te amo Casey, tu me haces sentir diferente… Podré matar gente, podré hacer sufrir; pero nunca podré obligar a alguien a amarme… Porque es verdad: soy un monstro- apuntó a si mismo el arma.
-No lo hagas- dije- Puedes buscar otra solución.
-Gracias por haberme apoyado- dijo y me miró con miedo, cerró sus ojos y luego, disparó.
Vi su cuerpo caer secamente al suelo y seguido, la sangre brotar de su cabeza, cerré mis ojos porque me dolía ver eso; él no era nada más que un hombre solitario.
-Blackly- dije y me acerqué a él, tomé su pulso pero ya no estaba. Me senté en el suelo a llorar ante esa terrible imagen- ¡Alguien!- grité- ¡Ayúdenme!- pedí y me levanté saliendo corriendo en busca de ayuda.