Estaba cada vez más incómoda junto a Blackly al ver la forma en la que me miraba. Pues, debía fingir porque todos creían que de verdad estábamos casados, incluso sus empleados ya que algunos iban y venían por lo tanto chusmeteaban cosas.
-Eres tan divertida- dijo una vez que termine de contar una divertida anécdota de cuando yo era pequeña para calmar la tensión.
Ya habíamos terminado de comer y estábamos por el postre hasta que me terminé el delicioso postre de chocolate.
-Esto está delicioso- dije terminando la última cucharada.
-¿Quieres más?- preguntó y negué por él bebé- ¿Vino?- preguntó y negué otra vez mientras él se servía a sí mismo.
-Creo que me iré a dormir…- dije y me miró apenado.
-¿Tan temprano?- preguntó.
-Es que estoy algo cansada…- dije y asintió.
-Entiendo…- dijo- Entonces ve, yo tardaré unos minutos, tengo que arreglar unos asuntos- dijo y asentí levantándome para irme rápidamente de allí. Me metí en la habitación de Blackly, donde dormía de costumbre y me metí en mi lado de la cama luego de ponerme mi pijama.
Escuché que la puerta se abrió y me hice la dormida para evitar conversación con él.
-¿Estás despierta?- preguntó en un susurro y no dije nada, solo apreté mis ojos para que no se abran- Casey- dijo sentándose de mi lado y yo maldije a mis adentros- Despierta linda- dijo y yo abrí mis ojos fingiéndome la cansada- Te compre algo- dijo dándome una bolsita y yo me senté en la cama.
-¿Ah?- pregunté fingiéndome la dormida y rió.
-Toma- dijo dándome la bolsa y la abrí; era un collar de oro con dos alas de ángel.
-por dios- dije olvidándome de que me hacía la dormida.
-¿Te gusta?- preguntó emocionado.
-Es bonito- dije mirándolo- Pero no puedo usarlo- dije negando.
-¿por qué no?- preguntó acercándose más a mi y yo miré hacia abajo- Pues, te debe de quedar hermoso y cuando lo vi, pensé en ti…- dijo tomando mi rostro y lo miré para hablar pero cuando quise ver, estaba besando mis labios: mierda.
No detuve el beso porque si no, podría hacerlo enojar pero si lo hice fingidamente y comencé a reírme falsamente para separar ese beso. Blackly se rió conmigo y no se molesto en subirse del todo a la cama acostándose a mi lado para seguir con el beso.
-eres demasiado perfecta- dijo besando mis labios mientras yo mantenía mis ojos cerrados del asco.
-Espera- dije separando el beso- Hay algo de lo que me gustaría hablarte- dije mientras desabrochaba su camisa lo que me asustaba.
*No pares de hablarle* me dije a mi misma recordando mi primera vez con Niall que no podía parar de hablarle.- Hoy iba caminando por la calle, y me encontré con una mujer que comenzó a contarme que sus hijos estaban en el Oeste- dije mientras quitaba su camisa y besaba mi cuello- Entonces, yo me pregunto… ¿Por qué no hacemos algo para que esa mujer tenga a sus hijos con ella?- pregunté.
-Haré lo que me pidas- dijo entre los besos- Pero por favor, déjame hacer esto- dijo y mis ojos se abrieron de par en par.
-¿Acabas de decirme que dejaras que entren en el Este?- pregunté mirándolo y me sonrió.
-Haré todo lo que me pidas- dijo besando mi mano- Solo no me dejes solo porque te necesito, necesito tenerte todos los días para contarte como me fue, necesito verte leyendo en mi biblioteca, necesito complacerte en todo porque, me di cuenta de que gracias a ti, mi vida tiene sentido…
