NO CIERRES LOS OJOS ©

Capítulo 14

El ambiente se despeja tras la huida de Brooke, atemorizada ante las amenazas que produce estragos en su mente. La oscuridad fue testigo de la batalla que ha resultado el ganador el rubio, más los deseos de celebrar no existe, es dimitida por sus reproches internos, dejando un rastro de la frialdad que domina sus facciones. Es cruel y despiadado la tortura que se le concede por un error que no ejecuto, donde es la victima de su verdugo, que lo golpea con los recuerdos de lo que lo ilusiono.

La cordura escasea, siendo una demostración la precedida sonrisa vacía de emociones que ilumina la sala del apartamento. Detonando el quiebre de un factor en su personalidad, mutilando lo que representa Niall como persona, volviéndolo un cuerpo sin espíritu.

—Una acción produce la reacción—Murmura suave, deleitándose brevemente por las nuevas sensaciones ajenas que surcan por su cuerpo—Y esta reacción condenará esa acción.

Sus pasos se dirigen sublimes a su habitación, la sonrisa continua plasmada en su rostro y sus ojos azules como el mar son abandonados por el brillo que los identifica de los demás, volviéndolo comunes a la vista. Se detiene en la puerta, colisionando sus zafiros con el esmeralda, neutraliza sus facciones al detallar la tristeza en Harry, que exige que explique los gritos que lo han despertado y las consecuencias que traerían a la venganza.

—Era Brooke Graham—Dice serio, adentrándose a la habitación para tomar asiento a un lado de Harry en la cama.

— ¿Qué es lo que quería?—Pregunta Styles, mirando al frente, empuñando las manos con la cobija interponiéndose. Conoce a esa mujer, la furia que le produce supera los límites que estable.

—Descaradamente, me incrimina de un crimen que no realicé—Dramatiza, obteniendo una mirada severa que ignora para continuar su relato—Asegura que he robado información a la empresa de sus padres, cuando no lo es. Por lo que tome la oportunidad de mostrarle mis propósitos y objetivos, advirtiéndole que si interfiere la destruiré.

— ¿Cómo puedo estar seguro de la veracidad de tu declaración?—Replica, inspeccionándolo, leyéndolo como un libro que expone los versos que lo componen.

— ¿Sospechas de mí?

Dolido lo observa, esperando una negativa de su mejor amigo. Su desconfianza demuele la poca estabilidad que prevalecido ante el hundimiento de su razonamiento. Un nuevo fragmento perdido y la alteración de la personalidad, comenzará.

—No, pero tengo mis dudas por tus acciones—Explica, viendo como ese matiz azul navega en el naufragio, buscando un capitán que tome el timón. Lastimándolo por no poder ser él quien lo guie en su desesperación—Unos códigos no pertenecen a la empresa de Malik, por lo que puedo suponer que involucra a los Graham.

—Supones mal, querido Harry—Gruñe, apartando su vista, negándole el poder de continuar ser el testigo de que necesita—Que no los hemos utilizado, no significa que pertenezcan a esa industria.

—Creer o no creer, un dilema que pueda perjudicarte, amigo—Mueve sus manos en el aire, danzando felices, disfrutando la frustración que surge en su amigo—Deberías confiar más en mí, ya que te he apoyado desde el comienzo. Si vas a anexar a esa familia a tu lista, no tengo inconvenientes.

Niall tensa sus músculos, cansado y decepcionado. Incrédulo por la susceptibilidad que ese hombre demuestra sobre su inocencia que intenta que predomine en la habitación. Aun cuando sus testificaciones están en su contra, las pruebas que brotan en sus pensamientos, le impiden darle la victoria.

—Confió en ti, tú falta de juicio está nublando la perspectiva que se presenta—Refuta, cerrando los ojos, relajando sus tensiones para prepararse a lo que pronunciará—Sin embargo, reconozco que tenga conocimiento del posible culpable de ese hurto.

—Dilo de una vez, Horan—Exige impaciente, cruzando sus brazos en su pecho, ansioso de encontrar una respuesta a sus divagaciones y no recelar de los objetivos que se plantearon.

—Los códigos de los Graham son eficaces, capaz de engañar a los expertos—Abre sus ojos, extrañado por las ansias del castaño sobre un tema—Pero a mí y a otro sujeto no, que posiblemente lo haya ejecutado. Es un amigo de Zayn.

— ¿Cuál es el nombre?—Su voz tiembla, sintiendo la adrenalina correr por sus venas, al vislumbrar en sus recuerdos esos ojos como el cielo.

—No lo sé—Se encoge de hombros, restándole la importancia que Styles le aumenta—Malik menciono en más de una ocasión lo experto que es al robar información, pero no su nombre. Por lo que puedo anticipar que esta la posibilidad que sea él.

Harry muerde su labio, deteniendo el temblor que lo asalta, presintiendo que Louis es el involucrado en todo el problema. Conoce su trabajo eficaz, lo habilidoso y peligroso que es al estar al mando de una computadora, capaz de apropiarse de lo que necesite, sin requerir el consentimiento de las víctimas.

—Louis—Suspira pensativo, deshaciendo sus brazos del agarre para tomar su cabeza, obteniendo la atención de Niall por la mención de ese nombre—Es él a quien le atribuyes la posibilidad. Sin embargo, ¿Cómo puedes inculpar a Tomlinson del hurto de los Graham?

—Es el chico que estuvo en mi empresa buscando a Zayn—Afirma tranquilo, manteniendo sus ojos fijos en la pared— Es solo una probabilidad, no estoy completamente seguro. Sin embargo, intuyo que ustedes estuvieron involucrados y no me refiero a la relación que sostuvieron.

—Trabaje con él en algunos comerciales—Aclara con su mirada establecida en sus manos, indagando en las memorias que impactan contra sus sentidos.

Un sonido es lo último pronunciado en la habitación, los dos hombres sumergidos en sus pensamientos, reclamando por respuestas que no encuentran y creando nuevas preguntas que los angustian. Niall precipitado se levanta decidido a averiguar si sus sospechas son ciertas, imponiéndose a no resignarse con sus dudas.

— ¿A dónde vas?—Indaga Harry, levantando una ceja al ver la determinación del hombre.

—Sígueme y te daré las respuestas a algunas de tus interrogantes—Otorga, alejándose de la habitación lentamente escuchando los pasos de su compañero tras él. Niall toma su laptop, encontrando unos archivos e ingresando en el sistema de esa empresa.

—Mentiste, tienes a tu disposición la entrada a sus documentos—Acusa, cruzándose de brazos, tomando asiento a un lado de Horan, mirando los algoritmos que se presentan.

—Mi padre tiene millones invertidos en esa empresa, debo estar al tanto de lo que ocurre en ella, no queremos perdidas. Aun cuando las bajas son notorias en el transcurso de estos meses, tal vez la compre al estar en la quiebra— Dijo, presentándole los detalles de la infiltración que acontece—Estos códigos no me los proporciono Dominic, lo conseguí por mi cuenta. Examina estos detalles.

—Excelente, buena idea—Halaga, acatando la orden e impresionándose por lo que puede ver en la pantalla—Esos datos no te pertenecen a ti.

—Exacto—Teclea rápido, codificando la ubicación de ladrón, sonriendo al lograr su acción— Puedes percatarte ahora de quien es su dueño.

—La empresa de Louis—Musita, incapaz de apartar su mirada de la realidad que se le presenta, exclamando que sea una aberración falsa.

—Debes aceptar lo que has visto aunque te decepcione—Aconseja, levantándose y depositando su aparato en un lugar seguro. Estira sus extremidades para tomar la mano del chico que se niega a moverse— ¿Podemos volver a dormir? Mi cuerpo no soporta el agotamiento.

Solo asiente, guiado por su conciencia. Es arrastrado por el rubio hacia la habitación, obligándolo a sentarse y reposar su espalda en la cama. Su mente no reacciona, hundido en el bucle de sus confusiones. Increyente de que del que una vez llamo amor haya cometido tal fechoría.

—Harry, duerme. No te mortifiques por lo que ha hecho, sin conocer sus razones—Habla acostándose, sintiendo en el proceso el cuerpo de su amigo aferrándose al suyo. Anclándose a su salvación de la desilusión.

Los brazos de Niall rodearon el cuerpotembloroso, retribuyéndole la ayuda de mantener la calma que él le ha otorgado.Sintiendo la respiración pausada anunciándole la caída en el reino de lossueños, sus ojos se fijan en la abertura de la cortina que permite la entradade la luz, vislumbrando la sensatez que culmina por desaparecer de su mente,dejando rastros de una locura predominante. Clamando que no desaparecerá y cambiarásu moderación, no existiendo límites que la determinen.