SEIS

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Fane caminó en su estudio aun adolorido en su hermosa herencia mientras aguantaba las burlas itinerantes de un Aric que se ahogaba con sus galletas de chocolate como si fuese un cachorro de su especie ¿Por qué sus hombres de confianza hicieron caso omiso para irle a buscar en ese lugar y preferir dejar que el gato roba galletas fuera por el?

Cuando vio que Aric estaba controlando por fin su ataque de risa lo miró muy irritado.

—¿Terminaste?

Aric se limpió una lágrima del ojo y luego ya calmado lo miró con tranquilidad.

—No, aun no rompe-bolas.

Y otra risotada que incluso contagió a las lobas del servicio en esa habitación. Mina no se saldría con la suya cuando la hiciera su señora iba a haber fuertes castigos y todos del tipo Christian Gray, las cincuenta sombras sería un cuento tonto para cuando se vengara.

Las lobas de confianza al servicio de Fane y Aric dejaron de reír cuando este gruñó furiosamente. Angelica y Patsy carraspearon, las féminas enseguida recogieron todo lo que estaba en la mesa del escritorio de Fane que no era mas que restos de galletas y el enorme vaso de leche achocolatada que Aric había vaciado por tercera o cuarta vez.

¿Cuando dejaría de tomar sus cosas sin su consentimiento?

—Esta fue una baja. —Dijo Fane cambiando el tema. —Tarde o temprano lograré que esa mujer me corresponda.

Aric lo miró ya por fin muy calmado. —Estas enredándolo todo, Mina no esta acostumbrada a que la persigan se ve que es demasiado independiente.

—Independiente pero oculta algo.

El gato irritante se puso serio por fin después de escuchar a Fane hablar.

—¿Que es lo que oculta?

—No lo se. —Respondió sentándose en su lugar frente al escritorio de cristal resistente. —Fui a buscarla una vez más y sentí una presencia que me dejó muy impresionado, algo se camuflaba en la oscuridad en dirección a ella.

Aric se colocó muy serio—¿Pudiste averiguar algo con ella?

Fane negó de inmediato. —Solo que es medio Fae de algún tipo acuático.

Aric silbó impresionado. —¿Es una Fae y tu estás como si nada?

El lobo lo miró y luego suspiró . — ¿Me dirás ahora que estoy loco por prestar atención a una Fae?

—No. —El gato negó con suavidad y dio un suspiro pesado. —Si fuese tu le haría el rapto y la mantuviera encerrada, ya sabes que lo que dicen de las hembras Fae y desgraciadamente son la raza que si acoplarse a su alma le paren a cualquiera.

Fane pareció pensarlo más a fondo y suspiró. —El rapto solo se realiza a mujeres lobo.

Aric se encogió de hombros sin importancia. —No si adjudicas que ella es tu compañera y que la vas a reclamar por la ley lupina.

Fane pensó con cuidado lo que acababa de decir el gato, el rapto era una modalidad de los hombres lobo para conseguir pareja cuando la soltería sobrepasaba la edad influenciada, consistía principalmente en un tipo de juego donde se agrupaban machos solteros quienes debían asediar sin lastimar a nadie a un grupo de hembras disponibles ajenas del rapto. El Alfa lupino consideró que el rapto de compañeras sería el momento oportuno para que Mina por fin estuviese a su lado, la idea era retorcida pero a medidas desesperadas era necesario un empujón así ella le odiara porque seguro como nada el obtendría rápidamente su perdón.

Aric suspiró de forma tranquila. —Eres un depredador, Fane. —Le dijo. —Ojalá que esto te haga bien ya va siendo hora que una hembra ocupe el lugar como Luna.

AMORES DE GREENVILLE 1: La Nereida y El Lobo*Finalizada*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora