31 días con Masaki.

<~10 Diciembre~>

Hikaru x Masaki

Hikaru Kageyama era el típico niño risueño, sonriente y aniñado de toda clase, pero también, uno de los delanteros fuertes del equipo.

Claro esta que todos deben tener un equilibrio de personalidad si no quieren ser el centro principal de ataques y ofensas por parte de otros o del mismo grupo.

Y bueno, este era el caso. Hikaru no le gustaba la violencia, para nada, pero, hay veces en la que debe usarse para dejar en claro que no eres la bolita de nadie.

Pero....

—Tal vez fue mi culpa...

—Fue un error mio.

Kageyama en verdad, era del tipo que prefería cargar con la culpa y represalias que dárselas a otros, motivos, bueno, era buena persona.

—¡¿Saldrias conmigo?! –estalló, no soportaba más las interrupciones o palabras a medias.

Podía considerarse a Hikaru como el hermano pequeño del grupo, en verdad.

Pero, después este dejó de ser la comidilla de todos de la noche a la mañana, ya no le recibían con burlas o golpes, mandadolo a comprar el almuerzo de otros con su propio dinero o hacerle dar vueltas por diversión.

—Tu que le vuelves a decir algo, te las veras conmigo –no eran las palabras, o el lugar donde se encontraban, sino aquella mirada de un cazador, aquella que quisiera no comer tu carne, sino el alma, aquella que intimidaba al más grande o fuerte.

A sentían repetidas veces con la piel de gallina y las piernas tambaleantes cual gelatina.

Fue exactamente a días de que Masaki Goenji entrará a su clase.