Tras ese momento la princesa desarrollo mejores técnicas defensivas, pero con lo que no contaba es una noche Neko se presentaría con un rayo congelador, los fantasmas estaban hechos de ectoplasma, un liquido muy fácil de congelar, pero cuando estaba apuntando se fijo en un pequeño espejo.
-Espera un momento, ese espejo es, ¡no puede ser!-Decía mientras lo cojía.
Lo miró unos instantes y dijo sorprendido:
-¡Este era el espejo de mi madre, estoy seguro!-Dijo feliz.
-¡Hey, ese espejo lo tengo yo desde hace años, si realmente es tuyo, demuéstralo!-Le respondió Bowlletta cabreada.
Entonces Neko le dio la vuelta mostrando una firma en kanji japonés que significaba Mokumi, su apellido.
-Vale, es de tu familia.-Reconoció enfadada.
-¿Sabes?, esto me ha puesto de buen humor, te dejaré en paz esta noche si me lo devuelves.-Le sugirió Neko.
-Lo siento pero no puedo dártelo porque, eh, porque esta maldito.-Dijo Bowletta inventádselo todo sobre la marcha.
-¿Maldito?-Preguntó Neko.
-¡Si, por la dama enmascarada, una de las almas en pena mas terroríficas!-Respondió nerviosa.
-¿Así, y porque no me cuentas esa historia?, si es tan terrorífica debe de ser muy famosa.-Le preguntó Neko desconfiando.
-Será un placer, hace mucho tiempo en el antiguo Japón, un señor feudal tenía como esposa a una mujer bellísima, pero al paso de los años la belleza empezaba a desaparecer, un día a la mujer le cayó una moneda en la cara y al quitársela se fijo que le había desaparecido las arrugas de esa parte de la cara, así que en secreto de su marido, fundió todas las monedas que pudo para hacerse una máscara para su cara, pero su marido la descubrió y se enfado tanto que la mató a patadas, el marido enterró a su mujer en secreto al pueblo y le regaló su única pertenencia a su samurai, pero el alma de esa mujer estaba tan cabreada que estaba dispuesta a castigar a los que tuvieran su espejo y hubieran lastimado a una mujer.-Narró Bowletta.
-Lo siento pero no me lo creo, y aunque fuera real esa maldición no me afectaría, yo nunca eh lastimado a ninguna mujer.-Explicó Neko.
Bowletta empezó a toser mientras le ensañaba las cicatrices que le había dejado en el pasado.
-¡Oye, tengo derecho a alimentarme, y también a recibir la herencia de mis padres, maldito o no, este espejo es de mi familia y de nadie más!-Se defendió Neko.
-Muy bien, pero no vengas llorando pidiéndome ayuda si te esta persiguiendo.-Le advirtió Bowletta.
Pero Bowletta tenía razón, por la mañana Neko no paraba de tener pesadillas sobre esa mujer y cuando se fue a la empresa no paraba de verla, decidió volver al castillo esa noche:-Estaré delirando por la sed.-Decía nervioso.
Cuando pisó el pasillo del castillo se la encontró cara a cara, era una mujer alta y pálida, con un peinado y vestido japonés, llevaba una máscara blanca y solo se le podía ver un pequeño hueco donde deberían estar los ojos, pero a Neko no le dio tiempo a fijarse en más porque empezó a perseguirlo creando gritos aterradores. Neko comenzó a correr intentando despistarla hasta que entró en la primera habitación que encontró, en ella estaba la princesa preparando una tarta, la cual se asusto al verlo.
-¡Me prometiste dejarme en paz si te daba el espejo! ¿Qué haces aquí?-Le preguntó al verle cerrar la puerta.
-¡Vale, tenías razón, ese fantasma me ha perseguido hasta aquí, tienes que ayudarme!-Le pidió nervioso.
-Haberme echo caso antes, las advertencias están para algo, ¿sabes?-Le respondió Bowletta indiferente.
-Si no quieres acabar seca como una pasa dime como deshacerme de ¡Eso!-Le amenazó Neko.
-Mira, yo no puedo ayudarte con esto, pero conozco a una especialista que tal vez pueda, su nombre es Mabel, una consejera del tarot regular que suele acertar en premoniciones, igual ella sabe como pararla-Le sugirió Bowletta.
-¿Dónde puedo encontrarla?-Le preguntó con prisas.
-Vive en el pueblo, en una casa con una gran bola de cristal en su cartel, no tiene pérdida.-Le explicó.
Neko le dio las gracias y salió volando hacia el pueblo, encontró rápidamente la tienda y dentro se encontraba una cappy con pendientes circulares y un pañuelo en la cabeza.
-Bienvenido, siéntate y adivinaré tu fortuna.-Le dijo seria.
-En realidad, no es por eso a lo que vengo, me esta persiguiendo un fantasma y no se como librarme de su maldición, quizás usted pueda ayudarme.
Neko le contó todo y tras unos pocos segundos Mavel le explicó que podía hacer.
-Esa mujer ansia poder ver de nuevo su cara, lo mejor que puedes hacer es devolverle su espejo- le aconsejó.
-¡¿Qué?! ¡Ni hablar, este espejo ha estado muchos años en mi familia, y no pienso dárselo a nadie!-Le dijo cabreado.
-En ese caso, que el destino se apiade de ti.-Le respondió mientras lo echaba.Pero al salir se volvió a encontrar con ella, quiso gritar pero la dama levanto su mano y lo dejó inconsciente, volando con el hasta el castillo.
Cuando Neko despertó, se encontraba atado a un montón de cadenas, intentó transformarse en un animal más pequeño para escapar pero entonces la dama bajó del techo y volvió gritar, era un sonido tan fuerte que Neko se desmayó por miedo, estrés y dolor. Entonces se encendieron las luces, mostrando a la dama como una marioneta y al lado había un reproductor musical que producía los gritos, entonces Kirby, Lololo y Lalala soltaron la marioneta al ver a Bowletta.
-Gran escena chicos, aquí tenéis lo prometido, una tarta para todos.-Le felicitó mientras sacaba la bandeja.
Pero fueron interrumpidos por Meta Knight y la familia del primer ministro, bastantes enfadados por el ruido.
-Alteza, ¿Qué narices ha pasado aquí, por que está Neko atado a una mesa y a que se refiere con la escena?-le preguntó Meta knight.
La princesa empezó a reírse de los nervios, pero acabo confesando.
-Siento mucho el ruido, pero era necesario para el plan.-Se disculpó.
-¿Qué plan?-Preguntaron todos.
-El plan para vengarme de Neko, ya sabéis todos lo que me ha hecho, pero al robarme el espejo estallé y me inventé toda una historia para asustarlo, le pedí ayuda a kirby, Lololo y Lalala para montar las escenas y que fuera más realista, soy una fantasma, lo mejor que se me da es asustar.-Explicó Bowletta.
-Eso explica porque no me sonaba la historia que te inventaste.-Entendió Neko.
-Esto, lo has oído todo, ¿verdad?-Le preguntó asustada.
-Si, y ahora que has terminado, ¿me sueltas ya, por favor?- Le pidió Neko.
Así ella lo hizo, pero nada más abrir el candado Neko le dio una patada a las cadenas y levantándose gritó:
-¡Ya decía yo que todo era demasiado raro para un alma en pena, ¿en serio creías que me iría con el rabo entre las piernas?, tal vez me hayas dado un buen susto, pero os voy ha enseñar lo que es el terror de verdad!-Gritó Neko cabreadísimo.
Al terminar de hablar intentó abalanzarse sobre ellos pero consiguieron esquivar el golpe, escapando lo más rápido que podían, Neko les seguía corriendo, de pronto, la silueta de la dama volvió a aparecer, pero Neko no estaba dispuesto en caer en la trampa de nuevo:-¡Ja, no pienso volver a picar!-Gritó mientras envestía la silueta, pero esta desapareció antes de recibir el golpe.
-Un segundo, si estáis todos hay, eso significa...-Decía preocupado mientras se daba la vuelta.
Entonces la dama volvió a aparecer a su lado.
-¡¡AAAHHHH, ES REAL!!-Gritó Neko presa del horror.
-Mi espejo... dámelo-Le ordenó la dama.
Neko rápidamente sacó el espejo y se lo entrego con manos temblorosas.
-LARGO...-Le ordenó la dama tras recibir su espejo.
Neko salió corriendo gritando:-¡¡Son reales, son reales, los fantasmas japoneses son reales!!-
La dama se dirigió hacia Bowletta, dándole el espejo.
-Has hecho un buen trabajo-Le dijo Bowletta antes de soplarle en la cara y desapareciera.
Todos estaban muy sorprendidos.
-Entonces, ¿era una ilusión?-Le preguntó Meta knight.
-Por supuesto que lo era, puede que en Japón ocurriera una historia parecida a la mía pero esta es más que falsa, yo no soy de vengarme, pero, que puedo decir, me encanta este espejo- Le contó mientras les guiñaba el ojo.

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Kirby el guerrero estrella ataca de nuevo
Fiksi PenggemarKirby, el guerrero más poderoso de la galaxia, se enfrentará a nuevos y viejos enemigos, grandes aventuras y momentos épicos junto a los demás de sus amigos, ¿podrán detener al ejercito del emperador oscuro?