One shots Marvel

• Tony x Steve •

~SMUT~

*NARRA TONY*

Debido al empuje de mi mayor, tire la taza llena de café al suelo haciendo que se rompa. Me tenia acorralado entre la encimera de la cocina y su musculoso cuerpo. E hiciera lo que hiciera, siempre encontraba un punto de mi cuerpo en donde posar sus labios.

Acariciaba mi cuerpo con sus grandes manos aunque yo me resistiera. No pude evitar suspirar gozosamente cuando metió su mano en mis pantalones para acariciar suavemente mi pene por encima de los calzoncillos. Y fue en ese momento en el que me sumi a su poder y fuerza para darle paso ha hacer conmigo lo que quisiera. Y así hizo.

Me subió a la encimera sentándome en ella y abriéndose paso entre mis piernas. Junto sus labios con los míos en un feroz beso, el cual controlo sin piedad. Mientras ya bajaba mis pantalones y ropa interior quitándolos directamente y lanzándolos al piso.

Al separarnos fue él que bajo su ropa hasta los tobillos y me obligo a levantar mis piernas para ponerlas en sus propios hombros así dejando vía libre a mi entrada.
Y así es como entró dentro de mi sin remordimientos, acción que me hizo gritar mientras apretaba la estantería en donde estaba sentado. Me agarro de mis muslos fuertemente para impulsarse lo más fuerte posible.

Yo pase mis manos a la espalda de Steve para arañarla con fuerza. Él respondía con suaves gemidos en mi cuello, gemidos que hicieron que mi piel se erizará.

A cada rato aumentaba más y más las embestidas y la fuerza de estas. Yo gemía gritando a la vez de que unas lágrimas corrían por mis mejillas.

Llego un momento en el que no podía aguantar más. Note como el clímax estaba cerca y no me lo iba a reprimir. No tardo mucho para que yo me corriera manchando a ambos. Steve al verlo paro y salio de mi interior.

Los dos respirabamos agitados. Me cogió con la menor delicadeza posible y me bajo al suelo para después girarme dándole la espalda a él. Con brusquedad estampó mi torso sobre la encimera, por suerte interpuse mis manos antes del impacto e hizo que fuera más leve. Aun así, el golpe hizo que gruñera en voz baja. Pero el grito llego cuando nuevamente volví a notar a Steve dentro de mi otra vez.

Comenzó fuerte, como siempre. Sus golpes eran secos y con cierto dolor, pero como buen masoquista me encanta el dolor. Nuevamente se aferro a mis caderas así dando unos golpes más precisos en ese punto que a mi me vuelve loco.

Mis gemidos resonaban por toda la cocina y diría que también por toda la torre. Me agarraba a la encimera arañandola fuertemente. Y el colmo fue cuando note sus dientes en mi nuca marcandome como suyo. La lágrimas no se reprimieron y salieron mojando mis mejillas.

Poco tiempo después, note como él se corría en mi interior produciendome un gran escalofrío.

Los dos coordinamos respiraciones mientras el salía de mi. Me incorporé y me di la vuelta o para mirarlo y me enganche en su cuello así abrazándolo.

- Te eche de menos Tony.- me dijo mientras yo me acurrucaba en su hombro.

- Y yo a ti Steve.- le conteste cuando el devolvió el abrazo rodeando mi cintura.

- Se nota. ¿Sabes? Podríamos terminar en la habitación.

- Aceptare encantado capitán.