One shots Marvel

~T'challa Udaku~

~HARD~

~Público: masculino~

*NARRADOR OMNISCIENTE*

- No creo que pueda seguir así...

- No por favor, TN no puedes...

- No T'challa, no quiero seguir siendo tu juguete.

- Jamás lo fuiste.

- Eso díselo a Nakia.

Un silencio un tanto profundo inundó la habitación real en donde los dos hombres estaban.

Era cierto que ellos dos tenían una relación bastante extraña, ya que ninguno de los dos se atrevía a dar un paso más para ser pareja. Pero eran buenos folla-amigos.

T'challa no quería poner en peligro a TN, sobretodo porque lo quería demasiado. Lo menos que quería es que a su amado le ocurriera algo.

Finalmente el de piel oscura suspiró pesadamente.

- Vamos... no te pongas así peque.- dijo T'challa acercándose a TN.

- No me llames así.- este se cruzó de brazos y se dio la vuelta para no mirarlo.

Cómo le gustaba a T'challa que se hiciera el difícil.

Con esto, el rey rodeó la cintura de TN y comenzó a besarle suavemente el cuello.

Por otra parte, el otro tenía una lucha para conseguir zafarse del agarre del mayor. Pero era inútil, es imposible luchar contra la pantera negra y ganar.

- Eres un idiota.

TN ya estaba agotado y demasiado excitado.
Entre intentar zafarse del agarre de T'challa y que la erección de este estaba totalmente pegada a su trasero.

- Oh vamos, tu también quieres jugar.

- Calla, no es verdad.

- ¿Que no? Eso díselo a tu amiguito.

Y es cierto que TN ya estaba totalmente erecto y esperando con ansias que su amante lo tomase por fin. Pero como no, se hacía un poco el duro.

Hasta que no aguanto mucho en tomar los labios de T'challa y comenzar un suave beso.

El rey wakandiano comenzó a llevar lentamente a TN hacia la cama y poco a poco lo fue tumbando.

- Que te esté dejando no significa que este menos cabreado.

- No espero menos de ti. Ya me perdonarás después de esto.

Y vaya si lo perdonó. A los cinco minutos de esta conversación tan breve, T'challa ya estaba dentro de su compañero dándole unas fuertes embestidas. Mientras TN, de rodillas exponiéndose a su amante mientras mordía fuertemente la almohada para acallar de vez en cuando sus gritos de placer.

- ¿Estas seguro que no me vas a perdonar?

- Te... te perdonaré dependiendo de lo que hagas ahora.

Y así es como el de piel morena acepto el reto y agarrando fuertemente las caderas de TN, comenzó un vaivén inmenso y a toda velocidad.

TN simplemente y no podía silenciar los gritos y sus gemidos. Ya no podía evitar que sus ojos se llenarán de lágrimas de puro placer. Y ya no pudo contener su ya segundo orgasmo de la noche.

- Entonces, ¿me vas a perdonar ya?- preguntó T'challa abrazando fuertemente a su amado por la cintura y elevándolo suavemente.

- Creo que te lo has ganado.

- Bien, pues ahora toca ronda de reconciliación.

Y así es como T'challa le saco un gritó a TN al empezar a moverse nuevamente.

Será una larga noche para TN.