One shots Marvel

~Natasha Romanoff~

~LIGHT~
~Publico: Masculino~

*NARRADOR: OMNISCIENTE*

Ser una de las personas de confianza del capitán América no es nada fácil. El simple hecho de tener que entrenar con él es un suplicio.

Esta vez, por suerte, T/N y Steve se encontraban en el gimnasio de la base a solas.

El entrenamiento de hoy: ring.

T/N ya había perdido la cuenta de las veces que había caído la suelo a manos de su compañero.

- Por favor, piedad.- dijo él mientras Steve se reía.

- Vamos levanta.

El rubio le tendió la mano a T/N y este la aceptó.

Cuando ya estuvo de pie diviso en la puerta a una pelirroja que tenía todas las intenciones de entrenar.

Enseguida se acercó a su amigo.

- Hey Steve, por lo que más quieras déjame ganar la siguiente.

- ¿Por qué?- preguntó el rubio con el ceño fruncido y cara de confusión.

- Porque acaba de llegar Natasha y quiero que se fije en mi porfaaa~

- Oh vamos T/N no seas crío, si quieres hablar, ¿con ella porque no vas tú?

- Claro, para que me pegue una de sus palizas rusas. No gracias.

- Entonces, ¿de que te quejas? Además, no tienes porqué hacer estupideces, ella ya se fija en tí.

Enseguida los dos chicos quedaron en silencio. T/N sorprendido y Steve arrepentido.

- ¿Qué?- preguntó T/N cuando asimiló lo que su compañero le dijo.

- No he dicho nada.

- Steve...

- Oj, simplemente ella me dijo que también le llamas la atención nada más, pero me dijo que no te lo dijera y ahora que te lo dije me va a matar. Así que callado.

- Hola chicos.

Los dos hombres se sobresaltaron al escuchar la voz de Nat a su lado.
Los dos giraron sus cuerpos hacia la pelirroja y la miraron.
Uno un poco asustado por si hubiera escuchado de lo que estaban hablando y el otro perdidamente enamorado.

- Ho... hola Nat.- saludo T/N.- ¿Qué tal?

- Ah... pues bien, venía a entrenar con Wanda, pero al parecer, todavía no llegó.

- Si quieres mientras entrenar con T/N, sin problema. Yo tengo que irme con Tony.- esta vez habló el rubio.

El contrario abrió los ojos como platos y le mando un mirada con una mezcla de odio y sorpresa a Steve. Este solo le guiño en ojo.

- A pues, si quieres sí.- dijo Natasha.

- Claro que quiero, sube.

"Me gustaría más invitarte a tomar un café :)" pensó T/N mientras veía como Natasha y Steve cambiaban posiciones. Esta vez la pelirroja frente a su oponente y Steve debajo del ring para disponerse a salir del gimnasio.

- ¿Te soy sincera?

- Claro...

- No vine a entrenar, por lo menos no de esta manera.

- ¿A qué te refieres?

- ¿Qué tal si vamos a por algo de beber? No tengo ganas de pelear contigo y hacerte daño.

T/N soltó una pequeña caracajada sabiendo perfectamente que si peleaba con ella, una costilla rota es lo de menos que le podría ocurrir.

- Entoces ¿qué?, ¿vamos?- preguntó ella girandose y yendo a las cuerdas del cuadrilátero.

- ¿Como una cita?

- No no, la cita me la tendrás que pedir tú.