Capítulo 39

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Aclaración: ha pasado un año.

***

—Marina's POV—

—Como recompensa por su comportamiento, el hada decidió convertir a Pinocho en un niño de carne y hueso —abrí los ojos poco a poco, reconociendo el cuento en mi cabeza—. A partir de aquél día, Pinocho y Gepetto fueron muy felices.

—F... Fin —dije con la boca seca, pestañeando repetidas veces para acostumbrarme a la luz solar de aquel lugar.

—¡Mami! ¡Mami! ¡La tía Marina ha despertado! —aclaré un poco mi visión y atisbé una pequeña figurita dando saltitos no muy lejos de mi posición.

—Espera un momento aquí —escuché hablar a otra persona—. Marina, no hagas ningún movimiento, por favor —me pidió la voz femenina y escuché unos pasos alejarse.

—Hola —y otros ligeros pasos se iban escuchando muy cerca de mí—. Me llamo Emma.

Mi enfoque se aclaró por completo, permitiéndome deslizar mi mirada por toda la habitación, hasta llegar a unas pequeñas manos que sujetaban con fuerza el fino colchón y la inspeccioné con detalle.

—Mi mami ha ido a bus... car a la señiora de la capusha blanca —la miré a los ojos, intentando procesar su presencia ante mi—. Mami tenía rasón —la pequeñaja también me inspeccionó desde su baja altura, inclinando su cabeza, para verme mejor.

—¿En qué? —me aventuré a preguntar.

Mis labios estaban completamente resecos y necesitaba hidratarme con urgencia.

—Tenemos el mismo color de ojos —Emma sonrió, contagiándome—. Mami Natalia dice que nuestros ojos son muy... ¡muy bonitos! —abrió los bracitos, como queriendo darme un abrazo—. Y mami siempre sonríe por eso —explicó, poniendo su diminuto dedo índice sobre el dorso de mi mano y haciéndolo bailar en círculos—. Eres muy guapa, tía Marina.

La puerta se abrió repentinamente, asustándonos a las dos.

—Bienvenida de nuevo, Marina —miré a la doctora con quietud, ella sonreía ilusionada—. Cuando tu hermana me dijo que habías despertado, no podía creérmelo.

Moví mis ojos, capturando el rostro de Alba: estaba llorando.

—Hola, cariño —saludó, mostrándome la misma sonrisa que Emma—. Me alegra que estés de vuelta.

¿Cuánto tiempo había pasado?

—Alba's POV—

Dejé a Marina en la habitación, recibiendo una óptima revisión de la doctora Cabello, mientras Emma y yo esperábamos en el pasillo.

—Mami, tía Marina es muy guapa —dijo Emma, entretanto que su boquita jugaba con la pajita de la cajita de zumo de naranja—. ¡Y tiene los mismos ojos que yo!

Reí por sus palabras, asintiendo con fascinación.

—Buenas tardes, señora Reche —crucé mi mirada con los policías que se acercaban a nosotras, mirándome con el gesto serio—. Venimos a hablar con la joven Marina Reche, hemos sido avisados de que ha despertado.

Asentí con la cabeza, sorprendida de que hayan recibido la información tan pronto.

—La doctora Cabello se encuentra dentro, pero creo que saldrá en unos minutos —tan solo segundos después de decir eso, la mujer salió del cuarto de Marina, extrañándose por tanta nueva aparición.

Volverte a ver - AlbaliaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora