38.

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- Mascarillas. - ordenó Jackson, mientras pasabamos por el tumulto de gente que esperaba a mi amigo en el aeropuerto.


Sin protestar, me coloqué la mascarilla negra que él me había regalado y caminé unos pasos detrás de él, utilizándolo como protección contra la gente que extendía sus teléfonos celulares hacia nosotros.

Solo cuando llegamos al auto, pude volver a respirar con normalidad. Era increíble lo que la fama podía hacer y yo no podía acostumbrarme a eso.


- Lo logramos. - comentó el chino con alivio y alegría mezclados.

- Lo logramos. - repetí con una sonrisa, antes de apretar su mano.


x


En cuanto puse un pie dentro de la compañía, sentí un gran alivio. No podía creer cuánto había extrañado ese lugar.

Jackson palmeó mi espalda un par de veces para que comenzaramos a caminar hacia el ascensor y nos dirigieramos a la sala de ensayos.

Le seguí en silencio, dedicándome a ver todo a mi alrededor en busca de algo que hubiese cambiado, en busca de algo diferente en el edificio. Pero todo seguía tal cual lo recordaba, como antes de que nos fueramos de Asia.

Las risas y gritos se escuchaban desde el pasillo, haciendo que mi corazón diese un salto de alegría en mi pecho. Pero no fue hasta que Jackson abrió la puerta para ambos que este órgano vital en mi cuerpo se detuvo.


- ¡Soo Ah! - gritaron varias voces masculinas al mismo tiempo.


Estaba de vuelta en casa.


- Hola. - saludé a todos con una sonrisa y me acerqué a saludar a los compañeros de grupo de Jackson. - Les he extrañado. - añadí, antes de darle un abrazo al menor del grupo.

- Bueno, pues podríamos habernos visto más a menudo si no se hubiesen ido a Estados Unidos por meses. - comentó Yugyeom, cruzándose de brazos y haciendo un falso puchero que me causó gracia.

- Te traje un regalo. - bastó eso para que el menor esbozara una sonrisa. - Antes de volver a China te lo daré, ¿bien?

- Gracias, noona. - murmuró enseñando los dientes y luego, se alejó para saludar a Jackson.


A pocos metros, captó mi atención un hombre de chaqueta negra y boina café, quien cubría parte de su rostro con una mascarilla y veía toda la escena atentamente.

Jinyoung.

Quise correr a él y darle un fuerte abrazo. Quise decirle que me había hecho mucha falta en los últimos meses. Pero no lo hice, ya no podía hacerlo. Así que me quedé en mi sitio y continué mi labor de saludar a cada miembro.

- Espera, entonces, ¿volverán a China? - quiso saber Jaebum, luego de que nos abrazaramos.

- Solo Soo Ah. - replicó Jackson por mí y no pude evitar voltear hacia Jinyoung.


Él desvió la mirada, de inmediato, y fue a sentarse en el sofá al otro lado de la sala.


- Pensé que te quedarías en Corea, noona. - dijo Yugyeom. - Ahora que Jackson no estará allá, ¿igual volverás?

- Soo Ah ha hecho buenos contactos en China. - volvió a responder Jackson. - Le han ofrecido trabajar con otras compañías, así que debe volver cuanto antes a Beijing.

- ¿Permanentemente? - insistió el menor del grupo.

- Estaré aquí y allá. - expliqué, intentando resistir a las ganas de ver a Jinyoung. - Por el momento, no estaré en Corea, pero espero que, dentro de poco, pueda volver.


Indeleble | Park JinyoungDonde viven las historias. Descúbrelo ahora