Sin apariencias 【SasuSaku】

11 | Invitación

Ahora Sasuke sabe muchas cosas sobre Gaara, y todo gracias a que Sakura no sabe cuándo callarse además de que le añade a toda su historia un montón de gestos y ademanes innecesarios, haciéndola ver como una niña tonta... pero no le sorprende, desde pequeña ha sido así.

En ocasiones, cuando debían despedirse prometiéndose verse el día siguiente, Sasuke se preguntaba si el rostro no le dolería con tantos gestos que hacía durante el día.

Y, a la mañana siguiente era lo mismo.

De oreja a oreja, la sonrisa de Sakura era imborrable.

Recodar ese pequeño detalle lo mantiene absorto un poco mientras ella continúa relatando creyendo que él la escucha.

Lo poco relevante que oye de ella, pues lo demás se le hace tonto, es a cerca de cómo Gaara, por órdenes de alguien, pretendía llevarla de regreso al Reino.

Bueno, aquello no le sorprende en realidad. 

Considera hasta que mucho tiempo había pasado para que nadie hubiese ido a buscarla. Después de todo es hija de reyes. Pero aunque todo un batallón estuviese detrás de ella, buscándola, Sasuke tampoco tendría intenciones de entregársela a nadie.

Sakura es su boleto directo a Konoha. 

Regresarla así por que sí sería una pérdida muy cara para él aunque constantemente le ha repetido que a él le viene importando poco que se vaya. 

La verdad es que no. Por supuesto que le importa...porque la necesita para sus planes.

Aún así Sakura ha actuado tal y como ha esperado desde el comienzo. Negándose rotundamente a regresar le indica que ni siquiera tendrá que esforzarse en retenerla a la fuerza con él.

Sin embargo...

—Ya veo. Fuiste muy valiente.

...no es de su interés reconstruir esa pequeña amistad que forjaron en el pasado pero a Sakura parece que sí. Si empieza a ser ligeramente más amable con ella quizá pueda obtener algo más a cambio.

De cualquier modo Sasuke no tiene que esforzarse en planear algo pues apenas él ha abierto la boca y ha dicho tal cosa, ella se ha sonrojado.

Sakura es demasiado inocente.

Dulces palabras que son falsas...pero que a ella la hacen feliz. Qué ironía.

—A-ah sí. No fue nada en realidad —balbucea ella sintiendo caliente las mejillas. Le ha elogiado...Y aunque sinceramente le gustaría que esa sensación alegre perdurara un poco más Sakura no puede evitar preguntarse cuánto tiempo van a estar solos en un lugar tan estrecho como lo es ese tronco de árbol—. ¿Cuándo crees que deje de llover? —pregunta, cambiando de tema. 

Sasuke presta atención a la lluvia luego de eso. Suspira. No se ha detenido en todas esas horas. 

—Supongo que hasta mañana —Sakura estornuda tan pronto él termina de hablar. 

Maldita sea. Lo que le faltaba. 

Si Sakura termina por pescar un resfriado será más difícil tener que lidiar con ella enferma.

Resignado solo se pone de pie comenzando a quitarse parte del haori, provocando que Sakura se ponga histérica en cuanto lo ve desnudo de la parte superior.

—¡¿Q-qué crees que haces?!

—Haces demasiado escándalo —dice pasando de ella, extendiéndole la prenda—. ¿Qué esperas para aceptarla?

—¡L-la próxima vez avisa! —advierte la Princesa con el rostro colorado, casi arrebatandole la prenda de golpe. Tienen que pasar unos cuantos segundos más para que Sakura se percate de otro detalle aún más vergonzoso que el anterior. ¡Tiene que quitarse la blusa en frente de él! —. ¡N-No pienso hacerlo! —eleva la voz unos cuantos decibeles más.