17 | Al límite

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 "Quisiera que no fueras como yo..."

Naruto lo tenía claro mucho antes de oír aquellas palabras salir de la boca de su padre.

Lo tuvo claro en el momento que Sai lo miró con profunda decepción pero también con profunda pena. Como si su discusión con el Rey solo hubiese sido un factor más para sumar a que la amistad con su hijo se rompiera. Como si el culpable no fuera solo Minato, sino también él mismo. Y, por ello, Sai no consentía el derecho de mirar a los ojos a Naruto a partir de eso.

Minato y él tenía un acuerdo pero a su vez Sai continuó viviendo una mentira con Naruto.

Por eso Naruto pensó lo peor cuando detrás de Kakashi, luego de entrar apresuradamente al estudio de donde tanto padre como hijo no se habían movido toda la noche, venía Hinata Hyuga con un aspecto desprolijo y con los ojos llorosos.

—¡Mi Rey, mi hermano ha...!

¿Ha decidido tomar acciones por su propio juicio? Si bien sabe perfectamente que Sai en realidad está genuinamente preocupado por Sakura, su reciente y acalorada discusión en el castillo, junto a la revelación a medias de una verdad que no debía saberse, debió también influenciar para que no pensara con la cabeza fría.

Se había apropiado de la situación en torno a su ira y a su pena para ni siquiera considerar ninguna de las advertencias que Hinata le dio, junto a sus súplicas para que desistiera, antes de partir.

—Todo es mi culpa —recuerda haber dicho Naruto con el semblante desecho y la culpa creciendo en su pecho a medida que Hinata aumentaba sus sollozos. ¿Qué había hecho? ¿A qué lo había orillado?

—No, Naruto. Es mía. Era mi responsabilidad y...

—¡Pero él es mi amigo!

"Quisiera que no fueras como yo. Que fueras diferente, que fueras mejor..."

Naruto lo tenía claro.

Siempre lo tuvo claro.

Solo que nunca creyó que llegaría el día en el que tuviera que probar que en verdad existían diferencias entre él y su padre. No esperaba que existieran, no esperaba que él fuera mejor que el Rey en ningún aspecto siendo él mucho más joven y con falta de experiencia.

"Pero tú tienes algo que yo no. Tú nunca abandonarás a un amigo"

La confesión de su padre, a cerca de una persona a la que tanto amó...

La recién huida de Sai a un páramo en el que se le hace difícil alcanzarlo...

No es un hecho el pensamiento de que una generación tiende a arrastrar los errores de otra pues lo que le ha contado su padre no lo considera un error. Solo, quizá, una mala decisión. Una mala decisión que tarde o temprano iba a repercutir en el futuro.

Todo eso junto a la nueva y fresca información que Naruto ha obtenido, gracias a Minato, y que apenas procesa mientras continúa galopando deseando que su corcel tenga alas para poder llegar más rápido a su destino, lo mantienen firme sin mirar atrás. Aunque es inevitable no tener la sensación de grilletes en sus tobillos. Grilletes afanados que lo conectan al pasado que Minato, por mucho tiempo, mantuvo oculto.

Como si ahora fuera él, su hijo, quien tuviera que arrastrar con ello.

Pero no solo él.

También está Sakura...

Y, quizá, alguien más.

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Sin apariencias 【SasuSaku】Donde viven las historias. Descúbrelo ahora