33 | Tomar las riendas

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Advertencia: El siguiente capítulo está sin betear (o sea, sin revisión) así que pueden que encuentren algunas faltas de ortografía y redacción. Salgo de viaje en un par de horas así que por eso (?) Lamento los inconvenientes.

Ninguna persona debería poder proclamarse Rey a sí mismo, no estando el Rey actual vivo y muchos menos también estando viva su descendencia

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Ninguna persona debería poder proclamarse Rey a sí mismo, no estando el Rey actual vivo y muchos menos también estando viva su descendencia.

Eso fue lo que Naruto creía, pues se educó oyendo y aprendiéndose todas esas leyes de manera forzosa pues era su deber como futuro sucesor de su padre conocerlas en dado caso que, algún día, fuese necesario lidiar con una situación así.

Minato le había dicho que eran cosas necesarias que debía saber, aunque no fueran a suceder.

Cuando oyó a cerca de eso, Sakura estaba a su lado, oyendo y fingiendo prestar atención porque, aunque ella no fuera a suceder a su padre, los tiempos venideros siempre podrían traer consigo conflictos entre hermanos. Al oír a cerca de eso, ambos rieron en frente de Minato. No porque les diera risa en realidad, sino porque...eso nunca sucedería. A pesar de las múltiples insinuaciones, a medida que fueron creciendo, acerca de que Sakura podía —y tenía todo el derecho— se hacerse de la corona si quisiera, la Princesa de Konoha siempre ignoró cada una de ellas.

No le interesó ni le interesaría nunca ser Reina, y en dado caso que cambiara de opinión, Naruto no tendría ningún conflicto en poner a su hermana primero antes que él si ese era su deseo.

Pero solo a ella y nadie más.

—¿Qué acabas de decir? —con el aliento entrecortado, claro indicio de que ha recorrido todo el castillo hasta dar con él, Sasori luce pálido y consternado, pero no más de lo que él está tras oírlo la primera vez. Aun así, Sasori repite lo anterior solo incrementando la ira de Naruto, incontenible e incapaz de ser detenida por Sai quien, a su lado, no alcanza a tirar del brazo de su mejor amigo cuando lo ve emprender una carrera frenética hasta el Salón del Sol.

No puede ser.

¿Qué su tío se ha proclamado Rey?

¿Con la decisión de quién?

Su padre está postrado en cama, y puede que esté incapacitado para ejercer su papel como Rey, pero los únicos capaces de tomar ese tipo de decisiones son, su padre desde luego, y el consejo real. ¡¿Pero y él qué?! No es que se considere listo para ocupar ese puesto, de hecho, es en lo que menos piensa ahora, pero no se puede tomar una decisión así con su padre convaleciente y sin siquiera consultarle a él.

A menos que...

—Abran la puerta —los guardias delante de él se miran cautelosos y nerviosos entre ellos, como si dudaran en retirar sus lanzas inclinadas, obstruyendo el paso de la gran puerta—. ¡Que abran la puerta, ya!

—Prín-Príncipe, tenemos órdenes de... —retrasándolo, pero dándole el tiempo suficiente a Kakashi, Sai y Sasori de llegar hasta dónde está, Naruto no espera negociar con nadie, yéndose de frente a los soldados, usando la fuerza, y el apoyo de sus amigos desde luego, para llegar al sitio que quiere.

Sin apariencias 【SasuSaku】Donde viven las historias. Descúbrelo ahora