THE PRINCES BRAIN [ Saga MÉDICOS parte 1]

Capitulo 27

Vanessa

¿Sé puede superar a un hombre en los Alpes suizos? Vanessa dejó caer la revista de chismes de la realeza en el  cesto de basura. Ridícula forma de superar a un hombre.

Por qué aquí hay nieve, nieve y más nieve.

Y precisamente aquí esta feliz y contenta, tiene tanto orgullo que jamás la verán llorar por un hombre. Claro que para superar a Alexander no hubiera escogido este lugar, quizá estaría bailando en una playa virgen de Hawai pero Aiden siempre escoge los viajes. En cambio esta cubierta de la cabeza a los pies y tengo la nariz más roja que una manzana.

Realmente el frio no ayuda en nada para superar una relación, así que esa revista es una mentira. Por primera vez quiso encerrarse en su habitación del hotel solo para comer helado de vainilla mientras piensa en cortarse las venas con una hoja de lechuga.

¡No, no, no esté lugar es demasiado hermoso como para desperdiciarlo!

Pasó saliva y detuvo su paso. Su atractivo vecino de habitación, al que vio quitarse su traje de esquiar mientras enseña su atractivo cuerpo. Eso la regresara a la vida de nuevo.

¡Ahh como extrañaba mi libertad! Q

— ¡Vanessa regresa al mundo! — Aiden chasquo los dedos delante de su rostro. Con dificultad casi inumana cargaba dos tazas de café humeante. — Deja de pensar en tu pobre vecino, lo vas a asustar. Simpre he creído que dentro de tu cabeza te imaginas cosas muy perversas. —

Negó varias veces y tomó una taza de café. Levantó la vista solo para ver de nuevo al vecino pasearse sin camisa.

— La vista es algo natural. ¿Míralo Aiden, y dime qué tampoco es atractivo para ti? —  El pequeño pueblo atrapado entre las montañas nevadas se encontraba sumido entre turistas y cientos de luces, comida y mucho más nieve. — Además ese hombre lo hace a propósito, le gusta que lo miren —

— Lo ideal es que te esperes a que tú rompimiento con el príncipe se haga de manera oficial, no es qué no lo sea, pero ante todo el mundo tú sigues siendo su novia — Barbara llegó con su hija en brazos, la arropó contra su cuerpo.

— Te quiero demasiado y no me gustaría que estuvieras en boca de todos. Solo esperan que cometas un pequeño error para destrozarte — finalizó Aiden. Su rostro preocupado reflejaba más que un simple consejo.

— ¿Un pequeño error? ¿Como el que cometió Alexander al salir de un jodido club de prostitutas? — contraatacó  molesta. — En cambio a mí me van a martirisar solo por mirar a una persona. No es para nada justo. —

— No tanto como eso, pero no queremos que tu vida privada se exponga aún más, ya bastante tienes con lo que hizo ese... Príncipe. — Aiden puso su mano sobre su hombro y lo apretó ligeramente — Ya sé que tú no tienes la culpa de nada pero hasta en la calle me han fotografiado ¿Para que? Pues porque soy el amigo de la futura princesa y esperan que declare algo de lo sucedido con el príncipe —

Al entrar al hotel se quito el pesado abrigo abrigo y admiró la madera pulida y la lujosa chimenea justo en la sala principal, con un aire muy conservador este era el ambiente perfecto. Talló sus botas contra el suelo y retiró la nieve que las cubría.

— Ex- princesa. Aunque a la gente le cueste admitirlo. Mi madre dice que mi relación con Alexander no ha terminado, de lo contrario ya habría salido en la prensa inglesa —  Se retiró los guantes y el gorro  —Durante toda esta semana algo ha estado rondando por mi cabeza. Si lo pienso bien yo me puede haber vestido como una de esas chicas que estaban en el club o pude haber bailado sensualmente para él...