Capitulo 30

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Vanessa

Llanto y mas llanto de bebe.

Cuando Vanessa era niña definitivamente sólo jugaba con muñecos de mentiras. Antes los podía abrazar por horas y sus brazos nunca dolían, cuando por fin se cansaba  terminaban en el fondo de los juguetes. En cambio los bebés de verdad no dejan de llorar. Con sus pequeñas manos se aferran al pecho de su madre buscando consuelo y calor. Tan pequeños, suaves y dolorosos.

 Un consejo medico, no mezclen el deseo con el tequila. No entiende en que momento se equivoco y olvidó los principios mas básicos, como usar preservativos. No culpara de todo a Alexander, ya que ella tampoco cuido de su propio cuerpo y dejó su futuro a los deseos de otra persona. Por experiencia propia no vale la pena el tener una buena noche de sexo para  terminar como todas las madres de sala de prenatal, gritando por los dolores de parto, medio dormidas, despeinadas y con ganas de morir en ese mismo momento.  

¡Es horrible!

— ¿Segura que quieres quedarte aquí sola? — La enfermera Rosie, salió de la recepción del área de prenatal y dejo algunos papeles —  Los cirujanos suelen estresarse en esta área del hospital. Se que quieres ayudarme pero.... —

— Pero nada, Rosie, vete a despejar la mente. Además no tengo ningún paciente al que atender y este lugar esta lleno — hizo para atrás la silla para girar la cabeza y mirar a todos lados. Las mujeres a punto de dar a luz caminan por los pasillos gritando de dolor. —  Me gusta ver el dolor femenino. Anda ya, no olvides llevar una sombrilla contigo no te vayas a resfriar —

Claro que le gustaría mas estar operando pero su sala de pacientes esta vacía y que mejor combinación, sala prenatal de noche, mujeres gritando improperios a sus esposos, ¡ah que divertido!

Por mas terrorífica que sea esta noche, incluso hasta el agua que charpea fuertemente contra las ventanas es el menor de sus problemas. Jamás había sentido mas miedo por pensar en el futuro. Se siente tan cobarde que ni siquiera a podido comprar una prueba de embarazo, es infantil que una mujer como ella no quiera saber la verdad. Sin duda por eso esta aquí ayudando en la recepción.

Ella necesita ver a otras mujeres embarazadas, porque como doctora las veía y puede que hasta con mirada de burla, pero ahora que tiene muchas dudas no puede cerrar los ojos ante lo inminente. A visto demasiados partos en su vida y sabe de memoria todo el procedimiento, sangre, gritos, papás con rostro de horror y bebes horribles.

Mio

Que el bebé sea suyo cambia todo por completo. Un pequeño bebé con padres disfuncionales. Un príncipe altanero, autoritario, con dos abuelas, una que esa reina y la otra tiene esquizofrenia. Como madre, una doctora que no tendrá tiempo para un bebé, una familia tan grande que el pobre bebé jamás se aprenderá el nombre de todas sus tías y muy posiblemente sus nanas sean las enfermeras del hospital. 

Arrojó el bolígrafo contra la pared, ¡Demonios! Las manos le sudan y la cabeza esta a punto de explotarle. ¿En que momento fue que se equivoco, ella, una doctora que ha dado platicas de sexualidad?  Es ridículo que un mujer experimentada como ella este posiblemente embarazada. Seria simplemente una idiota si lo estuviera. 

Seria la madre del próximo heredero y su vida jamás se alejaría de la Corona, ellos podrían llevarse a su bebé para criarlo como es debido en la monarquía. Pensar en eso solo la hizo sentir peor. Bajó su rostro para que su  cabello cubra su vista y de está manera ya no ver a más mujeres embarazadas. 

— ¿Disculpe, puede decirme donde esta el área de neurocirugía? Este hospital es muy confuso — 

Su acento extranjero llamó la atención. Su voz gruesa y calmada lograron que sus ojos se dirigieran hacia la persona detrás del mueble de la recepción. A través del lente de sus anteojos logró admirar sus potentes ojos color miel del mismo color que la arena. En menos de un segundo ya había inspeccionado, sus hombros anchos, su piel dorada por el sol, su cabello castaño que roza su cuello y la barba que endurece sus facciones, contraria a la sonrisa que muestra.

THE PRINCES BRAIN [ Saga MÉDICOS parte 1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora