Estaba bailando con mi amiga cuando veo a lo lejos a mis amigos de la preparatoria, no había convivido mucho con ellos pero no eran malas personas, decidí irlos a saludar.
-Hola ¿cómo están? ¿Que hacen aquí?
Hicieron una cara de sorprendidos y me miraron de arriba abajo.
~Muy bien pues venimos solo a distraernos un poco porque tenemos una fiesta en 2 horas.
¿En 2 hora? No podía creerlo sí que les gustaba la fiesta, yo en dos horas me veía en mi cama.
-wow súper bien.
~¿Quisieran venir con nosotros a la fiesta?
No dude ni un momento en decir que sí en dos horas ya estaría perfectamente bien.Pasaron las dos horas y estábamos en camino a la fiesta iba hacer en la casa de Alice una compañera de la escuela, su papá era el dueño de la cadena de hoteles más importantes en América, así que tenía unas grandes expectativas de esa fiesta.
Mi amiga se había ido en su coche con unos chavos y yo iba con André el niño que nos invitó a la fiesta.
Llegamos y mis ojos no creían lo que veían una casa enorme y hermosa, se oía la música desde lejos, esto se iba a descontrolar. En la escuela corrían rumores de que el hermano de Alice era muy guapo y quería conocerlo.
Entramos al jardín donde estaba la alberca era enorme y había mucha gente en el jardín con todos esos vasos color neón y bailando al ritmo de la música otros estaban besándose o se iban a un cuarto que todos sabemos para que es.
~ Ten te traje un trago tómalo
Me dijo este André mientras yo revisaba mi celular viendo los mensajes de Fredie que me había mandado 300 mensajes diciéndome donde estaba y porque lo había dejado solo, lo ignoré y acepté el vaso que traía André.
Por dios santo porque agarraba confianza súper rápido a las personas que no conozco ese vaso tenía un sabor raro pero podía ser el sabor del licor.
Buscaba a mi amiga y la encontré besándose con ese chico rubio de ojos verdes que estaba guapísimo así que mejor decidí ir a la barra donde estaban todos reunidos porque era una competencia de shots.
~ Nos falta una persona ¿quién quiere jugar?
No dude en decir yo mientras pasaba entre la multitud, llegué y vi que mis contrincantes eran puros hombres pero no me importo. Solo escuche el tres para poder agarrar el primer vaso de diez, tenía que hacerlo muy rápido para poder ganar y creo que así lo hice porque terminé con mucho tiempo de ventaja.
Vi las caras de mis contrincantes y estaban sorprendidos no lo podían creer y uno de ellos estaba guapísimo tenía unos ojos azules muy claros, su cabello era castaño y era alto con un cuerpo muy bien trabajado porque se marcaba sus músculos en la playera que traía puesta. Se dio cuenta que lo estaba observando y vi que venía directamente hacia mí.