Tras los pasos de mi hermana

Capítulo 24: -Te atrape -Ahora te callas

Resulta que como la madre de Jessica se enteró de lo de la amenaza con la pistola fue porque su misma hija se lo contó, ese mismo día que llegó de mi casa, ellas tienen el acuerdo de contarse todo después de todo solo se tienen la niña a la otra.

Acordaron que no habría secretos entre ellas.

En fin ahora la pregunta de la tarde se hace presente.

-Entonces ¿No han obtenido pistas sobre el paradero de Lucy?

Ella niega con la cabeza desanimada.

-Jessica: Papá sabe esconderse muy bien pero ¿Sabes? A pesar de las terapias psicológicas y todo eso a pesar de que eh dicho miles de veces en voz alta frente al espejo que ya no le temo más a ese hombre la verdad es que si lo hago -Su expresión lo demuestra es confusa y hay terror en esos ojos- Es decir, me dejó unas cicatrices horribles, ya no se van a quitar por eso son cicatrices es horrible quedar marcada de esa forma, sabes que tu propio padre te marco para siempre y que cada vez que te bañes te las ves recordandote los que paso, que no puedes ir a las albercas usando traje de baño normal porque todos se darán cuenta.
Hanna estas cicatrices ya no duelen por fuera pero duelen por dentro, sigo estando aterrada como cuando tenía 11 años y lo peor es que a pesar de saber usar un arma no me atrevería a lastimarlo, soy demasiado cobarde para ello.

Se hecha a llorar recostandose en mis piernas, eso me sorprende normalmente es ella quien consuela pero ahora justo ahora es mi momento de hacerlo.

La acarició su cabeza y canto una canción que mamá me cantaba cuando era pequeña, cuando de las pocas veces que se comportaba como mamá.

-🎶No llores más mi pequeña traviesa, cierra tus ojos y duerme bien que mami esta aquí para velar tu sueños, duerme mi pequeña traviesa, no temas más, que al dormir soñaras que todo esta mejor y al despertar tu sueño se hará verdad🎶

Un nudo en la garganta se forma, recordar a mamá siendo cariñosa me pone mal ya que lo era poco, amaba esa canción, siempre me la cantaba cuando tenía un mal día, cuando estaba triste o cuando Paulina me hacia algo.

Esa canción siempre me calmaba y parece tener el mismo efecto en Jessica o bueno Aranza ¡Dios ni siquiera se como llamarla! Bien le seguiré llamando Jessica, después de todo ese es su nombre ahora.

Poco a poco sus sollozos son menos intensos pero susurra algo que me destroza.

-Jessica: A Lucy le encantaba que le leyera cuentos, teníamos uno especial ella y yo, las dos iríamos al cielo para ser felices durante la eternidad pensábamos que solo así el infierno en vida acabaría.
Oh Hanna por favor sigue cantando.

Respiro profundo y carraspeo un poco, debo ser fuerte para no llorar también con ella, es decir, su historia es muy triste ella no merecía eso era solo una niña.

-🎶No llores más mi pequeña traviesa, cierra tus ojos y duerme bien que mami esta aquí para velar tu sueños, duerme mi pequeña traviesa, no temas más, que al dormir soñaras que todo esta mejor y al despertar tu sueño se hará verdad🎶

Repito la canción una y otra vez, la cubro con una manta pues tiene algo de fiebre por poco olvidaba que estaba enferma y por eso no había ido a trabajar, además una vrisnita por la tormenta que se acerca invade la habitación.

Se queda dormida con su cabeza en mis piernas y poco a poco yo también lo hago, con mi cabeza recargada en el respaldo de la cama, este ah sido un día lleno de revelaciones pero ningunas gratas.

¿Es preferible vivir en una dulce mentira o una cruel verdad?

No lo sé pero el dulce a veces es mejor.