VEINTITRES

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Otra vez el tienpo paso y yo estaba mas cerca de Derek pero no lo suficoente pero bueno. Desoues de mucho pensarlo tome la decisión de salir con Derek, después de rechazar su invitación por una semana, hemos convivido bastante en este mes. He estado yendo mucho a una de mis cafeterías, justamente voy a donde es mesero. Se le ve feliz ahí, ya no siente miedo, si tan solo supiera que soy el peligro andante.

–Hey, Miranda, ¿Lista?– me dijo animosamente cuando me vio llegar

–Para comer siempre estoy lista– respondí con una sonrisa

Su turno había acabado, fuimos caminando hasta la peletería que esta cerca del parque, el parque donde lo conocí. Cuando entramos nos atendió una chica de mediana estatura, cabello negro, ojos grandes de color café y muy delgada con unos grandes atributos, olía a lobo pero no es de mi manada

–¿En que te puedo ayudar, guapo?– le pregunto a Derek, ignorándome rotundamente a mi

–Me das dos tostitos cargados sin chile– respondió seco. – ¿Quieres algo de beber, lobita?– se dirigió a mi ignorando las miradas de la tipa esta y si señores me dice Lobito porque dice que mi carácter es de un lobo. Casi me muero el día que me dijo así pensé que había descubierto todo pero luego me explico el porque, sentí alivio pero a la vez pánico. Alivio porque ya lo sabia y pánico por el echo de que como le iba a explicar todo

¡En tu cara perra!

–Solo un refresco – conteste sonriendo en dirección a la chica

–¿Seria todo?– cambio su tono de voz

Derek iba a responder pero intervine

–Es mio– lance un pequeño gruñido lo cual la hizo saltar de su lugar y como Derek se entretuvo viendo su celular ni cuenta se dio de lo que dije y hice. Ella comenzó a preparar las cosas lo mas rápido que podía para que nos fuéramos

–Tengan lindo día – respondió tartamudeando y cuando Derek se dio la vuelta ella me dijo susurrando

Lo siento Alpha

No me gusta que la manada me tema de ese modo pero lo que es mio se respeta, aunque el no sepa que es mio.

Entramos al parque y nos sentamos en una banca a comer, hablando de cosas triviales y sin sentido, contando anécdotas de cuando eramos pequeños. Se sentía la conexión mas fuerte, tenia el camino libre para quedarme con él, sin embargo no se si el quiere algo conmigo o solo me ve como amiga.

Después de un rato las cosas se pusieron extrañas, se acercaba mucho a mi, tomaba mi mano y jugueteaba con ella como si no se diera cuenta de ello. Quise hacerle la pregunta pero salio algo muy estúpido de mi parte

–¿Porque terminaste con tu novia– solté de pronto como si no me acordara de que yo provoque que terminaran. Pero la perra se lo merecía como podía engañar a este ser tan maravilloso

–Me engañaba– solo dijo eso me recordo

–Lo siento, lamento haber preguntado eso– lo mire a los ojos. Sus ojos ya no reflejaban tristeza ahora tenían un brillito diferente

No supe como safarme del momento incómodo y dije lo primero que se me ocurrió

–Me tengo que ir, tengo que ir por unas cosas de mi mamá – me levante del banco seguida por él.

–Ow, lo entiendo– dijo con voz triste

–¿Sucede algo?– cuestione preocupada

–No nada, nos vemos después– respondió al instante

No dije nada pero Kiara y Valentina me gritaban que le dijera algo así que, que mas da. Ahora o nunca.

–Es que tu me gustas– cerré los ojos y apreté los puños nerviosa esperando una respuesta ya fuera alentadora o no

–¿Es enserio?– respondió asombrado

–Si– abrí los ojos poco a poco

–Que bueno, tu también me gustas– y me abrazo –Me gustas desde aquel día en el bar, me gustas desde que me rescataste de Elías, me gustas Miranda, ¡me gustas!–Lo último lo grito llamando la atención  de todos los presentes

Después de eso seguimos platicando, tomados de la mano, abrazandonos todo estaba bien, estaba feliz de saber que era correspondida peor ese momento de felicidad cambio a un momento gracioso pues Derek después de que nos dijimos lo que sentíamos ya casi para irnos dijo.

–Entonces... ¿Eres mi novia y yo tu novio?, ¿O como?– dijo mirándome a los ojos

Pero mas imbécil soné yo al decirle – Si tu quieres yo quiero– lo abrace y ambos reímos por el momento, la forma tan poco convencional de volvernos pareja.

Mi humano ya era mi novio. Y nada me hacia mas feliz que eso. Por fin estaba completa.


I N F I E R N ODonde viven las historias. Descúbrelo ahora