Modelo a seguir

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Dean siempre había sido un modelo a seguir.

Una persona amable, enérgica, que siempre intentaba ayudar a los demás. Podía ser grosero, un patán a veces, tener baja autoestima, ser soberbio e impulsivo. Pero nada de eso era realmente importante, no en comparación a sus virtudes.

Sam jamás había admirado a su padre; pero a Dean, sí.

Sentado frente a su computadora, esperaba que su hermano mayor volviese con la cena. Aunque se había entretenido lo suficiente como para perder la noción de tiempo, se percató de que su hermano estaba tardando bastante para tan solo tener que ir a la tienda más cercana a comprar comida. Supuso que debía haber mucha gente, aunque era bastante tarde para cenar. Cuando oyó que la puerta se abría, estaba por bromear al respecto, pero se detuvo.

-Traje la cena.

Dean estaba sombrío. A pesar de haber intentado sonreír mientras decía aquello, todo su rostro gritaba que estaba mal. Sam pestañeó, sin palabras. Su hermano jamás se mostraba tan mal abiertamente. Siempre se llenaba de máscaras sonrientes e irónicas que él tenía que sacar de a poco. Aunque no le era difícil, pues lo conocía demasiado y estaban casi todo el tiempo juntos, era un trabajo un poco arduo a veces. Sin embargo, allí estaba, el mismísimo Dean Winchester, completamente demacrado. Luego de aquella frase, se acercó en silencio hacia la mesa y depositó la bolsa. No dio explicaciones de por qué se había tardado, siquiera una excusa barata para simular lo que había ocurrido. Sus ojos verdes no lo miraban, si no que estaban centrados en algún punto lejano. Su mano aún sostenía la bolsa, a pesar de haberla apoyado en la mesa, evidentemente había sido un movimiento automático y ahora pensaba en otra cosa. Sam lo miró, expectante, esperando algún comentario o reacción que no llegó.

Dean no estaba bien.

-Gracias.-fue lo único que se le ocurrió decir. Había descartado el pedido de explicaciones por el momento, era obvio que Dean no estaba en condiciones de explicarse.-Dame eso, así preparo la mesa.

Apenas reaccionando ante las palabras de su hermano menor, el rubio soltó la bolsa con más lentitud de la usual. Se quedó estático mientras Sam sacaba las cosas de la bolsa, desenvolvía las hamburguesas y acomodaba todo en la mesa. Cuando acabó se sentó, dispuesto a comer, aunque estudiando cada reacción de Dean. Quien, en verdad, no reaccionaba: tan solo miraba la nada sumido en sus pensamientos. Sam sintió que su corazón daba un vuelco en su pecho. Si algo lo descolocaba, era ver mal a Dean. Verlo tan afectado por algo que ni siquiera intentase disimularlo. ¿Cuándo había sido la última vez que lo había visto así? Sam no recordaba la muerte de su madre. Había sido trágica y cruel, pero él no tenía más de medio año como para guardar algo en su memoria. Sí recordaba la muerte de su padre, pues no habían pasado tantos años de ese otro suceso terrible en la historia familiar de los Winchester-Campbell. Y también recordaba, entonces, a Dean. Nunca lo había visto tan mal, tan roto, tan triste, tan angustiado. Tan culpable. No es como si se comparase a como se veía ahora, pues no había nada peor que la muerte de un héroe (como John lo era para Dean), pero sí que aparte de ese hecho Sam no recordaba haber visto a Dean de tal manera.

-¿Dean?-intentó llamar su atención.

Dean tan solo seguía mirando un punto en la nada. En silencio.

-¿Dean?-repitió.

Al fin, su hermano reacción. Pestañeó algunas veces, y luego miró a Sam con una pregunta en su rostro.

-¿Quieres cenar?-preguntó sin segundas intenciones, ni reproches, ni pedidos.

El Winchester mayor se sentó en la otra silla, sin responder. Así, en silencio, comenzaron a comer. Dean no se atragantaba con la comida como solía hacer, de hecho, casi parecía que comía como un robot que sigue un comando inscripto en su cuerpo de antemano. Se llevaba la hamburguesa a la boca, mordía, masticaba, tragaba, y así de nuevo. No hacía ruidos de placer, no saboreaba. Sam comenzaba a preocuparse. ¿Qué podía ser tan grave que tuviese a su hermano en ese estado? ¿Qué estaba pensando Dean? Peor aún, ¿qué estaba siguiendo?

El asesinato de Anna Milton [Destiel]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora