Trébol

12°

Los árboles floreciendo inundaban todo el lugar, era mágico y parecía que celebraban con ellos su Victoria, cada uno de ellos había triunfado en el concurso que había elegido para participar y ahora se encontraban festejando en el campus de la universidad con todos sus compañeros y miembros de la facultad ya que por fin daba término la serie de eventos de ese día y la conclusión de aquel festival deportivo.

Los Pokémon estaban libres por todo el lugar y cada uno disfrutaba  de la compañía de sus amigos y otros Pokémon de su mismo tipo o no, así como disfrutaban de comida preparada especialmente para ellos y sus entrenadores se encargaban de sus propias actividades de recreación.

Ash sonreía triunfal mientras portaba orgulloso su medalla de primer lugar, Squirtle y Pikachu habían sido las estrellas de la competencia y no podía estar más que emocionado por ello; aquello estaba lleno de alegría y su única preocupación era cuidar a Charizard (quien presumía a otros Pokémon) para que no se saliera de control.

Poco a poco el ambiente fue cambiando mientras los estudiantes de las facultades vecinas se mezclaban y fraternizaban, aún faltaba para concluir oficialmente el evento y todos disfrutaban de la escasa vigilancia docente de la zona.

De pronto, una castaña se guindo del cuello del pelinegro mientras éste trataba de quitársela y tanto Misty como Brock tratabande hacerle ver que estaba asfixiando a su amigo, esta chica se llamaba Serena, quien desde que inició la carrera había intentado ser la novia de Ash pero éste ni siquiera le hacía caso, ella era muy popular y tenía a la mayoría de chicos a sus pies, sin embargo a Ash no y eso la hacía estar más empeñada en él.

Por fin lograron que la chica se apartará y el pelinegro logró respirar finalmente a la par que Brock lo asistía y Misty se ponía de barrera entre la castaña y su amigo ya que sin duda alguna ninguna se llevaba bien.

-Aléjate, tú no tienes nada que hacer aquí, Ash ya te dijo que no le interesas, vete con tus amiguitos y déjalo en paz-.

-¡Ah sí!, y, tú me lo impedirás pelirroja mal teñida-.

-¡Cómo te atreves!, ¡Yo sí te mato!-.

Por suerte Brock y Ash lograron detener a su amiga a tiempo mientras que la castaña se mofaba de "su victoria".

-Por favor Serena, no es momento de pelear-.

-Ash querido, ella empezó, yo solo me defiendo-.

-¡Yo sí la mato!-, Misty volvió a insistir.

Poco a poco la  pelirroja se soltaba del agarré de sus amigos, cuando de pronto, una chica peliazul cayó al suelo frente a ellos deteniendo la aura asesina de Misty y centrando toda su atención en ésta.

-¡Auch!-.

-¿Estás bien?-, cuestionó el pelinegro, a lo que ella asintió mientras Brock la ayudaba a levantarse.

Serena ante la falta de atención hacía ella iba a volver a tomar la palabra cuando la chica peliazul tomó la mano de los tres amigos y con ojos de ilusión habló:-los admiró, me ha encantado como efrentaron cada uno su desafío, mi nombre es Dawn, mi sueño es ser cordinadora Pokémon y me encantó su desempeño en la competencia deportiva, soy de primer semestre y sería un honor ser su amiga o al menos me gustaría que ustedes me dieran algunos consejos si no es mucho pedir-.

Los tres chicos se miraron sorprendidos sin saber que decir ante aquello, sonrojandose inevitablemente pues aquella chica les recordaba a los simpáticos vecinos de Ash y los halagaba, no obstante, antes de poder si quiera decir algo, Serena habló.

-Hola, mucho gusto, soy Serena de la facultad de arte, supongo que has oído hablar de mí-, habló de manera pretenciosa y extendió su mano hacía la menor quien la tomó con duda y de inmediato volvió a centrar su atención en el grupo de amigos haciendo enfadar a la castaña y sonreír a la pelirroja quien con suma superioridad exclamó:- Dawn podemos contestarte lo que quieras; Serena, ¿puedes dejarnos a solas?, tu presencia aquí no es requerida-.

De inmediato los ojos de la peliazul comenzaron a brillar y dejó en olvido a la castaña a su lado.

Al ver que no le ponían ni una pizca de atención y al notar que todo giraba alrededor de la chica nueva a la castaña no le quedó de otra más que irse mientras soltaba un bufido en señal de molestia, claramente humillada e irritada por aquel desplante y desprecio, desapareciendo de aquel sitio y dirigiéndose a su propia facultad a la par que se empeñaba aún más en tener a Ash para ella a como diese lugar...