El destino los separó y dividió su camino en dos, pero ambos volverían a encontrarse por una promesa, una promesa que ambos hicieron y que honrarían aun si la vida se empeña en separarlos, pues ambos se aman y lucharán por volverse a encontrar, sin...
Cumplía día a día las espectativas de su familia, hacía cualquier cosa para que no hubiera nada que les pudiese llevar a pensar que él aún pensaba en aquel pelinegro, pero, a puerta cerrada el dolor se incrustaba en su corazón y solo su pequeño Evee era quien podía escucharlo y consolarlo.
La luna en lo alto era un recordatorio de aquel día en que se despidieron, las estrellas eran testigos mudos de su aflicción y aquella gorra que no se cansaba de observar era el lazo de su unión.
Odiaba fingir pero era un experto en ello desde niño, un experto en engañar a los demás y a sí mismo, sin embargo, desde su confesión ya no podía engañarse, no más, no podía fingir ante él mismo y el amor que profesaba, así como ante sus sentimientos, aquellos que lo hacían llorar todas las noches desde que se fue de su lado, solo y en silencio para que nadie más que su Pokémon y los astros celestes pudiesen saberlo.
Aquel triste corazón solo anhelaba una cosa y daría lo que fuese por cumplirlo, aún si eso significaba mentir para lograrlo.
Se centró en el estudio y rápidamente se hizo popular, más que por él mismo, por su dinero, tal y como suponía que sería, ya que en un mundo tan frívolo del cual era parte y al que siempre lo buscaban llevar, era algo de lo más lógico sin dudar; tenía que tener paciencia y temple para afrontarlo ya que no soportaba a la mitad de personas que lo rodeaban y que le brindaban su falsa amistad, no obstante, todo lo hacía por Ash y, sabía que pronto tendría que sacrificar más de su escasa paz, pues tenía que conseguir una novia para despistar aun más a su familia, algo que enserio le causaba repulsión y que para él era como una traición, sin embargo era la única forma de que ya no tuvieran dudas de él, era la única forma de por fin quitar la atención de su familia hacía su amado pelinegro, sin duda, su amor no era un juego y se jugaría el todo por el todo con tal de un día volver a verlo.
Aquello era el inicio, pues para poder estar a su lado primero tenía que conseguir sus metas para poder pararse frente a él con la frente en alto y el corazón en la mano, convencido de que ese camino lo llevaría hacía su amado pelinegro y sin la opción de darse por vencido, pues confiaba en que Ash no lo haría....
Espero que les guste.
"Feliz San Valentín a todos" 😘💟❤❤🌹🌹🌹.
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