Trébol

15°

Gary sonreía genuinamente mientras observaba un pedazo de papel con letras impresas, realmente estaba muy orgulloso de sí mismo, pues, había conseguido un lugar en el seminario científico al que siempre había querido asistir junto a una mesa de exposición para dar a conocer uno de sus proyectos de investigación a través de un póster científico en Ciudad Verde en la región de Kanto, una zona cercana de su amado Pueblo Paleta.

Esa era una grandiosa oportunidad para él, sería su primer congreso y su primera presentación profesional, así que, sin poder evitarlo el júbilo lo embargo y abrazo con todas sus fuerzas a Umbreon, sin duda alguna estaba más cerca cada vez de alcanzar sus objetivos.

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El día se acercaba y él se preparaba con todo su empeño para dar una buena impresión, el viaje sería pronto y ya tenía listas la mayoría de las cosas que ocuparía y, de un momento a otro, observó la gorra, aquel amuleto que había perdurado a través de los años y sonrió con ternura  mientras sus energías eran renovadas, aquello siempre lo llenaba de felicidad y esperanza.

Su camino había sido muy difícil y pedregoso, pero ahora, todo le auguraba tiempos mejores, aquel era el primer paso para abrirse camino en el mundo de su padre y abuelo, aquel era un escalón más para llegar a su amado, si bien, él no sabía donde estaba actualmente su amado azabache, no sabía si estaba en Pueblo Paleta o se había marchado, Ash seguía muy incrustado en su corazón, su decisión de no buscar su paradero había sido por dos razones principalmente, una, para que su familia no sospechase y otra, por el simple hecho de que saberlo y no ir hacía él lo llenaría de mucho dolor, además, no saberlo era parte de la aventura que él tenía que vivir para encontrarlo ya que a diferencia de él, Ash no tenía parientes reconocidos en algún ámbito y su nombre no sonaba por el mundo Pokémon.

Tomó sus apuntes y salió de su departamento dispuesto a tomar las clases de aquella tarde a la vez que miraba de reojo aquel objeto que cargaba con sus deseos y sueños.

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Por fin el día del viaje llegó y el grupo de estudiantes y profesores que irían a aquel evento se reunieron frente a la universidad ubicada en Ciudad Júbileo en la región Sinnoh,  ahí tomarían el transporte para llegar al aeropuerto y dirigirse a la región de Kanto, sería realmente un viaje pesado pero sin duda alguna valía la pena, algunos como Gary expondrían sus investigaciones y otros solo serían participes del simposium y expectadores de las muestras académicas que se expondrían.

Todos llevaban sus Pokémon insignia con ellos, algunos los portaban en sus respectivas pokébolas y otros los tenían a su lado como era el caso de Gary quien llevaba a Umbreon en su regazo, aunque, también con él se encontraban sus demás Pokémon en sus respectivas pokébolas.

El viaje hizo que su corazón palpitase y mientras observaba por la ventana del avión la nostalgia asaltó su mente y un pequeño dolor se instaló en su pecho mientras su mente se llenaba de recuerdos y anhelos, ante ello, Gary abrazo fuertemente a su amado Pokémon y una lágrima silenciosa lo asaltó secándola de inmediato, pues, nadie podía ver su debilidad, por suerte, su compañero de asiento dormía por ser muy de madrugada, ya que habían sido citados muy temprano para aprovechar al máximo el viaje.

Su semblante era sombrío pero una triste sonrisa surco su rostro y valientemente volvió a mirar por la ventana, no lloraría, lo había prometido, pero, como siempre, uno no puede ignorar y callar sus sentimientos...

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El día había sido muy productivo, después de llegar a Ciudad Azulona en el centro de Kanto habían dado un recorrido guiado por la zona y luego emprendieron el viaje directo a Ciudad Verde donde se estimaba llegar al día siguiente.

Al llegar a Ciudad Verde disfrutaron el hermoso paisaje y pararon a desayunar en un colorido sitio local donde se prepararon para ir directo a la universidad, ya que como no era un viaje de esparcimiento debían aprovechar todo el tiempo que éste durase, mientras que sus cosas descansarían en el transporte alquilado especialmente para toda su visita a Kanto.

Las conferencias empezaron y todo transcurrió tranquilamente y sin contratiempos, al día siguiente él presentaría su ponencia y el día después de ese estaría lleno de más conferencias y talleres además de hacerles entrega de un reconocimiento por su asistencia.

Al salir de ahí, su grupo se reunió y siguiendo con su programa los profesores se reunieron con otros académicos presentando a sus jóvenes promesas y acordando una visita guiada por el plantel al siguiente día para eventualmente dar un paseo por la ciudad y terminar en el hotel en el que se hospedarían.

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Al sentir los primeros rayos del sol Gary se despertó con entusiasmo y con nerviosismo, ese sería su gran día, se preparó lo mejor que pudo, tomó a sus Pokémon, sus apuntes, su trabajo y todo lo que ocuparía y salió al encuentro con sus compañeros y profesores.

Al bajar, desayunaron y fueron al aseo para terminar de refrescarse antes de ir directamente a la universidad...

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La exposición fue todo un éxito y pese a los nervios, Gary estuvo de maravilla; en su descanso fue a visitar algunas otras exposiciones y en su recorrido creyó reconocer un rostro familiar, sin embargo, descartó la idea de inmediato debido a que no lo creyó posible.

Más tarde, se llevó a cabo el recorrido por las instalaciones de la institución y se les dió un espacio de tiempo para pasear por la cafetería de la escuela, el cual, Gary aprovechó sabiamente comprando algunos alimentos, no obstante, su corazón se detuvo cuando sus ojos se encontraron con unos intensos ojos ónix que él reconocía de su infancia, pues frente a él se encontraba el amor de su vida quien también se paralizó en ese mismo instante, creando una burbuja donde solo existían ellos dos, hasta que..., una figura femenina se interpuso en su campo de visión, plantando un beso en aquel pelinegro, haciendo que Gary soltará sin querer su comida y abriese sus ojos sin poder procesar aquella imagen, sintiendo por un segundo que su corazón se paraba y que dejaba de respirar sin saber que hacer, ya que aquella imagen era demasiado impactante para él y sin poder evitarlo sintió dolor y miedo mientras evitaba mostrar lo que sentía, sin poder pronunciar palabra alguna.....