"No me olvidaste porque me fui. Me fui, porque ya me habías olvidado.
— Anel Marielle
Dulce
Un dia increíble pasé con mis hijos y Any, apesar de tanto estrés pude olvidarme de todo un rato.
La noche llegó, fui a ver a mi princesa, leía su libro favorito.
Cuando fui a la habitación de Ben, él ya estaba en la cama. Me vio y sonrió.— Es hora de dormir cariño— digo mientras me acerco a su cama.
— Mami, de verdad lo siento— se sienta en la cama.
— No es tu culpa, Isabel tendría que haberte cuidado — tocó su mejilla.
— Pero yo me fui, y no debí hacerlo.
—Es cierto, pero los adultos debemos estar atentos a los niños travieso como tú. — él sonríe.
— Es linda y buena Mami.
— Bueno, si te gustan rubias y tontas, claro que si es linda — digo irónicamente.
— Ma... — dice llamando mi atención.
— Si?
— Sí quieres que la odie, la odiare. — se sube a mis piernas— Pero tú eres la más hemosa para mi.— lo miró, y veo amor en sus ojos. Lo abrazo fuerte, y lo beso hasta el cansancio.
— No mi amor, no quiero que la odies. Esta bien lo que sientes. Sí a ti te gusta es estupendo. — él asiente. — Ahora a dormir.
— Mami quedate conmigo hasta que me duerma, por favor— junta sus manitos, y a esa carita no le puedo decir no.
Me quedo con él, hace que le lea un cuento y luego queda dormido. Acarició su cabello, y por un momento pienso que pasará si muero, entró en pánico porque no se que pasaría con él y Ana, son muy pequeños para estar sin su mamá.
Me levantó despacio para que él no sienta que me estoy yendo, bajo a la cocina y termino de ordenar lo que queda.
Prendo la laptop, y busco los comprobantes de los pasajes para poder imprimirlos. Miró hacia la izquierda y allí esta el papel con el número de mi hermana.
Lo pienso bastante, y decido buscar mi teléfono.
Marcó su número, y espero que atienda. Dos tonos y escucho su voz.— Hola... — dice del otro lado de la línea.
— Claudia, soy Dulce — digo conteniendo el aliento.
— Dulce, hermanita! — responde sorprendida.
— Sí, soy yo...
— Dulce, Any me contó todo. Quiero que sepas que estoy contigo, y lamentó tanto todo. — su voz se quiebra. Camino al jardín de casa, no quiero que nadie nos escuche.
— Estoy asustada hermana, no quiero morir— la voz me tiembla.
— Eso no pasará, me oyes! — dice segura.
— Quiero pensar en positivo Claudia, pero se expandió y no se que pasará. — digo angustiada.
— Hemanita, sólo puedo decirte que estaré contigo. Any me dijo que el lunes vienen a Nueva York, y estaré allí contigo. Te prometo que estaremos bien — trata de tranquilizarme, lo sé porque su tono de voz es el mismo de cuando eramos niñas y ella me calmaba porque le tenía miedo a las tormentas.
— Dulce — una voz que reconozco al instante hace que me de la vuelta. Christopher.
— Te llamó mañana Claudia, Christopher esta aquí. — ella se despide y cuelgo. — ¿Como entraste? — digo mirándolo enfadada.
— Toque timbre y nadie me abría, y decidi entrar.
— Sabes que tu ya no vives aquí ¿no? — lo desafió y veo que se esta enojado.
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No podré estar sin ti ✔
Fiksi PenggemarQuien juega con agua se acaba mojando. Ahora todas mis lágrimas llevan tu nombre. Quisiera tener respuestas de todos mis ¿Porque? pero es inútil. Sólo deseo que todo este bien, después de esto.