Louis estaba de piedra mirando a Harry. Pero, vamos, Louis sólo le confesó que lo había extrañado y Harry saltó diciendo que lo amaba.
Y él sabía muy bien cómo era Harry en los momentos de impulsos sanos, un jodido chico sincero.
Podía largarse a reír, por si acaso era una broma, pero veía el brillo en los ojos verdes y las caricias sinceras en su mano.
Podía enojarse, decirle que no podía venir y declarle un amor que hasta hacía sólo días no podía aceptar.
Pero sólo le sonrió y le devolvió el apretón de mano mirando de nuevo a la carretera.
Sintió su mano ser elevado y miró a Harry en el momento justo que éste mordió el dorso de la mano del ojiazul.
—¡Hey! ¿qué te pasa?
Lejos de soltar su mano, Harry la tomó con más fuerza y se acomodó de costado para empezar el espectáculo.
—¿Que qué me pasa? ¿ESO PREGUNTAS? —gesticulaba con las manos, llevando la de Louis en el proceso tirándolo un poco hacia su lado.
—Hey, hey, que vas a hacer que choquemos. ¿Te explicas?
Harry se acercó más a él, sentándose casi al borde del asiento, con las piernas abiertas para que la marcha no le molestara.
—¿Que me explique? ¡Creí que yo era el de las pocas neuronas, Tomlinson! —Y Louis tuvo el pensamiento de que sería necesario hacer a un lado el auto y hablar bien con el rizado que ya parecía sobre exaltado.
Divisó a unos cuantos metros la estancia donde se encontraba el salón. Soltó la mano del agarre de Harry y cambió de marcha, ganándose un quejido de Harry que, sabía, le miraba fijamente.
Sólo entró por el camino que daba al salón y estacionó el auto a un costado, lejos aún de la estancia, pero fuera de la ruta.
Sólo bastó mirar a Harry para que éste reaccionara.
Saltó encima suyo, aplastándolo contra el asiento y moviéndose con una rapidez extraordinaria al ponerse a horcajadas sobre él. Mirándolo fijo, el ceño fruncido, sus manos buscando las del ojiazul.
—Te digo que te amo, que te amo demasiado y sólo me sonríes ¿qué mierda es eso?
Los grandes dedos acorralaron los de Louis al tomarle la mano nuevamente.
El ojiazul tragó saliva con dificultad e intentó mirar a otro lado pero una mano de Harry se soltó y tomó su mentón, obligándolo a conectar el verde con el azul. Louis se encogió de hombros sin saber bien qué decir o hacer. ¿Debía que decirle lo que él pensaba, lo que él sentía? ¿Esperaba un "Yo también"?
—Está bien...
Harry no pudo mantener la expresión esperanzada, simplemente se dejó llevar por la decepción.
—Sí, quiero decir, decía que... Yo, eh, bueno, ya sabes... Te amo mucho porque... eh, ¿somos amigos? ¿cierto?
Una de sus palmas aún unidas, los dedos juntos y la unión latente y electrizante. La mano del rizado permitiéndole que la mirada azul no escape hizo de soporte a su estado de ánimo, haciéndolo sentir bien con el tacto debajo de ella. Louis en serio estaba mirándole los labios y acerándose mientras él divagaba, pero no sabía qué pasaba, qué había sido eso porque él ya había confesado, ¿por qué ahora sentía la necesidad de retractarse?
Pensó, fue la tajante respuesta de Louis, seca y no muy segura de sentir lo mismo. Amor, es pesado, el amor es tan imponente, tanta responsabilidad y ellos apenas habían hecho las pases, habían vuelto a ser por minutos los que solían ser y él debía abrir su gran boca y largar tremenda cosa. Lo sentía, por Dios que sí, pero debía acallar algunas cosas, necesitaba un filtro porque Louis ahora parecía asustado, frustrado y Harry pensó que había arruinado todo. La narices se tocaron y sus alientos se mezclaron.
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El documental de Harry Styles. [Larry Stylinson]
FanfictionEl famoso Harry Styles estará liado en su propia red de mentiras al firmar el contrato de su propia película. Él deberá reencontrarse con viejas amistades, enemistades y amores. Entre ellos, Louis Tomlinson, su ex-mejor amigo; que esconde y también...