Mi camino... serás tú?

24-. Mi error?

Malditas pesadillas que hacen que me despierte de la nada, cosa que las siento tan reales provocando que ya no pueda volver a dormir y maldita enana yo en estos momentos debería estar en el 8vo escuadrón recibiendo mis indicaciones y no aquí en la casa practicando con esta Katana de madera, suspiro de resignación.

No me queda de otra que seguir con las indicaciones si es que no quiero hacerla enojar mas, cosa que creo que aun sigue molesta por ese incidente.

Tss, Maldito bastardo, pero eso no se quedara así ya me las pagara.

- Ichi-nii el desayuno ya esta servido.- me avisa Karin

Dejo el pedazo de madera en el suelo, toma la toalla que esta en la rama de un árbol y me empiezo a secar el sudor, entro a la casa.

- Madrugaste mucho.- me dice Yuzu mientras me pone un plato y un vaso de jugo frente a mi

- Si, no tenia mucho sueño.- le miento, no le diré que he tenido pesadillas.- Y el viejo?

- Ayer le marcaron del Hospital para que los ayudara con una cirugía, así que se marcho temprano.- me cuenta Yuzu

Empezamos a desayunar nosotros, mis hermanas terminan y se alistan para ir a clases, Yuzu me indica que me dejo el almuerzo preparado que tan solo tengo que calentarlo, que estará de vuelta para la hora de la comida, yo le digo que no se apure que yo me puedo hacer algo, que haga sus deberes sin apuro.

Ambas se marchan y me quedo solo en la casa, así que mejor para no pensar en la presentación que se realizara en el 8vo escuadrón decido ir a correr, lo mas seguro que si hago mi rutina de ejercicio tendré mi mente ocupada.

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Llego a las instalaciones del 8vo escuadrón, pues hoy es el día en que se les da la bienvenida a los nuevos, ya tenia rato que no me presentaba por aquí.

He estado muy ocupada con mis misiones que el pobre de Ashido es el que se hace cargo de casi todo aquí. Mientras que entro por esa gran entrada todos mis subordinados me ven y se acercan a saludarme y a preguntarme como he estado, a los que les contesto que ya estoy mejor. Todos son tan amables, mientras avanzo todos me van contando las novedades y que mi Oficial a hecho un gran trabajo en mi ausencia.

⁃Se quedara ya Taicho?.- me pregunta uno

⁃No, solo vine a dar la bienvenida a los nuevos y a organizar unas cosas, aun tengo cosas que hacer fuera.- les contesto seria

⁃Que mal Taicho.- contesta otra

⁃Si, extrañamos que usted nos entrene Taicho.- menciona otro

Todos caminamos hasta a uno de los salones lo cual ya estaba todo listo para la bienvenida. Los felicite a todos por su gran trabajo, les di indicaciones y todos se marcharon a sus puesto ya que no tardaban en llegar los nuevos.

⁃Taicho.- escucho la voz de Homura mientras corre hacia mi, siempre que estamos con los del cuartel me habla formalmente, igual Shizuku.- ya llegaron los autobuses

⁃Perfecto, avisa por favor a los de adentro que tomen sus lugares, yo iré a la entrada.- le digo mientras que ambas nos separamos

Llego a la entrada y veo como todos bajan nerviosos, entusiasmados. Los otros les indican que hagan unas filas para que puedan entrar. Todos hacen caso y se empiezan a acercar a mi. A lo lejos diviso al amigo de Ichigo. Estúpida cabeza de zanahoria, si no se hubiera peleado estaría aquí en este momento, en fin no se le puede hacer ya nada.

Les indico que me sigan una vez que todos están formados. Entramos por el gran camino de piedra hasta llegar a un salón donde se abren las puertas por dos shinigamis. Al entrar se ven unas mesas con diversos platillos y bebidas. Les indico que tomen asiento junto con los demás shinigamis. Mientras que yo me dirijo a la mesa principal de enfrente, donde ya se encuentran los lideres de cada sub unidad y mi Oficial.