Mi camino... serás tú?

53-. ¿Por que no ella?

Llego a donde me había indicado y al entrar noto como le enseña a unos niños ciertas técnicas. Sonrió al verla tan concentrada.

Para no interrumpirla me coloco en una esquina. Después de unos minutos da por terminada la clase. Los niños hacen una ligera inclinación y rompen filas pero rápido la empiezan a rodean entusiasmados preguntando qué tal lo habían hecho al escuchar lo que querían corren con sus familias que los estaban esperando para irse, ella se acerca a una banca y toma una toalla.

- Buen trabajo Sensei.- digo y ella rápido voltea a verme

- Llegaste antes

- Me desocupe antes.- ella asiente y continúa secándose el sudor.- ¿cómo estás del brazo?

- Bien

- ¿Ya puedes hacer esfuerzo físico? ¿no deberías estar guardando reposo?

- Ya estoy bien, la capitana de Hime me curo y si me recomendó que debería descansar pero...

- ¿Y entonces qué haces aquí haciendo esfuerzo?.- la interrumpo.- deberías estar descansando

- Tranquilo, que cuando Hime se recupero me visito y me curo así que.- empieza a mover el brazo.- ya no me duele, ya está completamente sano

- ¿Segura?.- no estoy totalmente convencido

- No tienes por qué dudar de mi y menos de los poderes de mi mejor amiga.- me da un puñetazo en el hombro con el brazo que se había lastimado

- No es que dude es solo que deberías de reposar un poco más por si acaso.- voltea los ojos y empieza a guardar sus cosas en su mochila

- Exagerado.- pero le veo una sonrisa.- tanto su capitana como ella dijeron que estaba bien y podía seguir con mis actividades sin ningún problema y por las dudas también le pregunté al papá de Ichigo y me dijo lo mismo

- Ok, ok.- digo ya vencido.- si Unohana-san Taicho lo dice todo está perfecto entonces

- Exacto.- se coloca frente a mi.- a todo esto, por llegar antes tendrás que esperarme

- Creo que si.- me empiezo a rascar la cabeza.- ¿puedo esperarte aquí?

- ¿Aquí en el Dojo?.- yo asiento.- si, no hay ningún problema

- Entonces aquí te espero

- No tardo.- y se va corriendo

Suspiro y me pongo a observar como entrenan unos jóvenes.

****************

Espero no a ver tardado tanto.

Llego al Dojo y lo primero que veo es a Renji dándole consejos a los que siguen practicando.

- Si separas un poco más tus piernas...- decía mientras le indicaba a uno cómo hacerlo.- Tira el golpe.- le hace caso y logra tumbar a su compañero

- Lo logre.- decía muy entusiasmado

- Debería de contratarte.- le digo y el solo sonríe divertido

- Cobro caro

- Supongo.- ambos sonreímos.- sería bueno tener a un Teniente aquí, definitivamente elevaría la reputación del Dojo

- Me utilizarías.- se cruza de brazos y alza una ceja

- ¿Es un Teniente?.- nos interrumpen los jóvenes muy emocionados que estaba ayudando

- Si.- se infla al ver cómo lo empezaron a admirar

- Es una excelente idea.- gritan entusiasmados.- pero primero a nosotros