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___________ McKassie

Tenerla en mi regazo me gustaba, aún que su trasero estaba muy acomodado en mi pene y éste no tardará en despertar.

-- Camz, no crees que ya tenemos que descansar?.- Pregunté, ella se acomodo mucho mejor en mi regazo y sus ojos se guiaron a los míos.

-- Contéstame algo.-

-- Esta bien.- Ella sonrió de lado y sus manos se guiaron a mi cabello.

-- ¿Me deseas?.- Al decir esas palabras ella se mordió su labio.
Mis palabras no salieron, pero mis manos respondieron agarrandola de su cintura pegandola a mi, ella soltó un pequeño gémido y la giré recostandola en el sofá con sus piernas enredadas en mi cintura.

-- Te deseo tanto.- Le dije entre un susurro a corta distancia de sus labios, nuestra respiración estaba elevándose por la atracción sexual que estábamos padeciendo.
Sus manos comenzaron a bajar por mi abdomen lentamente hasta llegar a mis pantalones desabrochandolo.

-- Yo también te deseo tanto.- Y ahí fue donde sentí la aprobación, así que me levante un poco para desabrochar mi camisa rápidamente y ella hizo lo mismo con mis pantalones.
Aventé la ropa y a ella la levante un poco comenzando a desvestirla, hasta quedar solamente en ropa interior.
La batalla de besos comenzó a devorar nuestros labios, con deseo pero con sentimiento, o al menos eso yo sentía.
Nuestros cuerpos sentían nuestro calor, el toqueteo eran delicados pero con algo de explosividad. Su mano se guió a mi pene acariciándolo suavemente. Yo solté un pequeño gémido por los movimientos que hacía Camila, mi pene se sentía duro y me daba unas fuertes punsaciones de ya estar en acción.
Con mi mano le quite su sostén aventando al suelo haciendo notar sus pequeños pechos, lleve uno de ellos a mi boca, sus dedos comenzaron a vagar por mi espalda, mi mano se guiaron a sus bragas entrando entre ellas para acariciar su femenidad, lo cuál ella se erizó al sentir el toque. Mi lengua jugaba con su pecho, en seguida comencé hacer un camino de besos húmedos por su abdomen subiendo para llegar a su cuello, succionando algunas partes de su piel delicada, la besaba y la mordía disfrutando también de su aroma y nos besamos con tanta pasión.
La sostuve un poco más a mi cuerpo haciendo ligeros movimientos con mi cadera rosando nuestros sexos.

"Aahh". Pequeño gémido soltó Camila, la satisfacción de las dos era fantástico.

-- Te quiero dentro de mi.- Yo también la quería con tanto deseo. Así que le quite sus bragas y yo me quité los boxers. Me levante para ir por mi cartera agarrando un condon y lo destape deslizando el plástico por mi pene. Ella se sentó en el sofá y abrió sus piernas haciendo notar toda su femenidad, así que me acerqué a ella, agarre mi pene colocando la cabeza en su femenidad rozando. Así que comencé a introducirlo lentamente, ella estaba agarrando con fuerza los cojines del sofá y mis manos agarrando el respaldo del sofá.

"Mmh-aah". Soltó Camila de su boca, así que era la respuesta de que ya estaba adentro, comencé a moverme hacía adelante y hacía atrás, sus manos se posicionaron alrededor de mi cuello. Nuestros sexos chocaban a cada movimiento, nuestra respiración iba con armonía a los movimientos, nuestro cabello estaba alborotado y sudado. Me detuve un momento y la agarre de sus muslos cargandola sin que mi pene saliera de ella, así que nos dirigimos a la habitación y la recosté en la cama siguiendo con los movimientos, ella arañaba mi espalda y nos besabamos con tanta desesperación.






Mi Mánager. (Camila C. y tú G!p)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora