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Ya me encontraba  arriba del avión, claramente yo iba demasiada nerviosa por lo que va pasar, la chica que me dará aquellos papeles me da intriga, no sé quién sea como para que mi mamá le hubiera dado la suficiente confianza. Mi mente comenzó a pensar una y otra vez sobre esta chica, y sobre todo de la junta del Lunes. En serio que las cosas entre las disqueras, entre Fifth Harmony, entre Camila y mi relación con ella se volvieron tan complicadas, y en verdad que ya estoy harta. Harta de sus putos juegos, harta de sus contratos, harta de que quieren manejarnos como si fuéramos sus esclavas, pero no podíamos hacer nada al respecto porque estábamos bajo a un contrato que ni siquiera leímos, ellos no nos permitieron que la leyéramos, por eso la junta la organicé con el propósito de que las chicas estuvieran juntas, las cinco, pero claro bajo una condición. 

(...)

Camila pov. 

- En verdad, necesito saber ¿Porqué ______ organizó una junta este Lunes?.

- Camila, yo no te puedo decir nada, sabrás cuando sea el día, sin embargo por ahora no.

- Por favor no seas así Juan.

- Lo siento Camila, pero no puedo decírtelo.

No le insistí más y tomé en brazos a Hunter para llevarlo a la habitación, tenía que bañarlo porque vendrían mis padres. Lo desvestí y su piel eran tan cálida y morena. 

Después de una hora y media de bañarlo, cambiarlo y dormirlo mis padres ya se encontraban en el apartamento estaban preparando algo para cenar, Sofía estaba mirando una película en la televisión de la sala, yo estaba montando la mesa para ya poder cenar hasta que escuché la puerta sonar, se me hizo raro que alguien viniera al apartamento sin avisar. Mi padre optó en ir abrir la puerta. 

- Hey, Hola Lauren.- Escuché la voz de mi padres con buen entusiasmo, yo estaba confundida, Lauren no tenía que haber venido al apartamento sin haberme aviso. Miré el pequeño pasillo y ella estaba adentrando al apartamento con una vestimenta sencillo, sus jeans azules ajustados azul marino, un par de tenis converse blancos y una ombliguera color negro, su cabello lucía negro y suelto. Ella sonreía al mirarme, yo no pude evitar sonreír y me acerqué a ella saludandola de mijilla. 

-¿Qué haces aquí?.- Le pregunté a la chica de ojos verdes, ella sonrío y me hizo una caricia en mi mejilla.

- Tu padre me invitó a cenar.- Ella sonrío y yo miré a mi padre. No era mala idea de que ella esté aquí pero sí era una falta de respeto a la casa de _______ mientras ella no estaba. 

(***)        

_________ pov.

Llege a Londres después de ocho horas de vuelo. Simón mandó a un chofer para que fuera a recogerme en el aeropuerto y esté conmigo en los transcursos que estaré yendo, pero ahora tendré que ir directamente al hotel para dejar mis cosas y pasar a un lugar a comer. 

Entre toda la multitud comencé a buscar mi chofer que se llama Nicolás, o al menos es el nombre que me dijo Simón, miré a mi alrededor y por fin hallé a Nicolás, un señor que a simple vista se miraba como de 43 años, tenía puesto su traje y un pequeño cartel donde decía "Welcome to London _______, my name is Nicolas", su cabellera estaba platinado, se miraba que se cuidaba su rostro, un señor de estatura alta como de 1.80, muy sonriente por cierto. Me encaminé a él sonriéndole y lo saludé estrechando la mano. 

- Muy buen día señora McKessie.- Dijo el señor tan sonriente que juro que esa sonrisa es contagiosa.

- Buen día señor Nicolás.- Le sonreí.

Mi Mánager. (Camila C. y tú G!p)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora