CAPITULO 12

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Ian apenas lograba encontrar una razón por mi renuente actitud de aceptar lo que al parecer para él, comenzaba a ser evidente; cuando todo tuvo sentido, al ser partícipe de la íntima escena que Steve y yo protagonizábamos frente a sus narices.

Steve se había percatado de la extraña cercanía que había entre Ian y yo, cuando entro en la terraza; razón por la cual decidió mostrarle a quien quiera que fuera ese hombre, que papel jugaba en la historia.

El nerviosismo y la incomodidad que sentí en ese momento no se comparaban con nada, jamás esperé que precisamente a mí me pasara, me sentía acorralada. Por un lado estaba Ian, el chico extremadamente atractivo e impulsivo que había despertado tantas cosas en mí, que realmente no pensé que algún día sentiría; y por otro lado estaba Steve, el hombre con el cual compartía una relación de años, que me comprende, me ama y me es fiel. Y para hacer más interesante la historia, ambos estaban frente a mí, sin conocerse uno al otro y yo sintiéndome que moriría.

Por un lado no quería que Ian pensara lo peor de mí, pero por otro lado rogaba porque Steve no hubiera presenciado el intenso beso que había protagonizado con Ian, porque de ser así; no sabía que explicación darle respecto a eso; ya que lo único que me pasaba por la mente, era lo mucho que lo había disfrutado.

-Y bien preciosa… ¿Me extrañaste? – Pregunto Steve con cierta arrogancia.

-uhmm… si… - El tono de mi respuesta sonó poco convincente y Steve pareció notarlo.

-No sonaste muy convencida preciosa – comentó Steve queriendo aparentar una diversión que evidentemente no sentía; porque aunque no quería demostrarlo se

Sentía en cierto modo amenazado por la presencia del hombre con el que había encontrado a Alexa y que ahora los veía de lejos sin ocultar su molestia. – ¿Fui inoportuno al llegar? o ¿Me estoy perdiendo de algo? – Preguntó para conseguir algo sobre el hombre que los veía con insistencia.

-No, no, claro que no – contesté dándole un abrazo y mi mejor sonrisa, mientras ingeniaba una respuesta coherente para darle o  quizás algún tema que me ayudara a evadir su última pregunta – Te extrañe mucho Steve, por un momento creí que no vendrías o que te había ocurrido algo. – Por la cara de Steve, supe que no daría por terminado el tema y seguiría insistiendo hasta saber quién era Ian. – Y respecto a tu pregunta, sabes que nunca eres inoportuno. – Le sonreí para dar por terminado cualquier interrogatorio que quisiera empezar.

Ian no podía apartar la vista de la pareja, en parte porque no comprendía quien era ese hombre; y por otro lado, porque por primera vez en su vida, deseaba ser él quien tuviera el poder de arrancarle esa sonrisa a una mujer… Y si esa mujer era alguien como Alexa Adams, muchísimo mejor.

-Creo que deberíamos ir a saludar a tu “amigo”, que no ha podido disimular el gran interés que tiene por nosotros… o quizás deba decir… ¿por ti? – el tono de esta última pregunta, sonaba más como una afirmación y por la mirada de Steve podía notar que no le causaba gracia la presencia de Ian.

-No digas tonterías Steve, es solo un conocido de papa… de verdad no me gusta el camino que está tomando la conversación. – dije con tono firme para que terminara con el tema. – Deja de hacerte ideas que no tienen sentido, mejor vamos para que te lo presente, a ver si así te queda claro, que estas en un error al decir que él tiene un interés especial por mí – dije fingiendo no entender el motivo de sus recriminaciones, aunque de sobra sabía que en parte Steve tenía motivos para sentirse molesto; pero evidentemente fui muy convincente, porque Steve solo sonrió y posó una de sus manos en la parte baja de mi espalda mientras nos dirigíamos a donde Ian se encontraba.

TE ODIO PORQUE TE AMODonde viven las historias. Descúbrelo ahora