XXIII

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La repentina aparición de Cole en el show encendió de nuevo mis traumas y mis inseguridades.

Benjamín y Ethan, ambos, están realmente insistentes con la idea de que vaya a consulta con un psicólogo, pero honestamente siento que ya es muy tarde para eso.

Sin embargo, a pesar de todo lo que sucedió con Cole, el show fue en éxito total, no solo para mí sino para Pearl también. A la gente le encantó y eso que realmente no hicimos un espectáculo tan grande, solo hicimos un doblaje y ya, pero ahora cada una tiene un espacio los viernes por la noche en Rocco para montar un espectáculo y no veo la hora de hacer mis piruetas.

Hace mucho no practico acrobacia y por eso es que ahora mismo me encuentro revisando los arneses y la seguridad que me van a brindar las cuerdas que cuelgan del techo de Rocco para mi espectáculo.

Una vez verifico que todo está en orden y que es seguro proceder bajo a revisar mi nuevo camerino. Aunque decidimos que era más práctico compartir el camerino con Pearl cada una tiene su estación de maquillaje y su propio clóset, la hospitalidad de los dueños de Rocco ha sido espléndida desde el incidente.

-Así que éste es tu camerino.- dice Adam junto a mí. -Está amplio, me gusta. ¿Ya decidiste que zona usar?- dice

-Sí, quiero éste rincón- le digo señalando el rincón más lejano a la puerta.

-¿Aquí?- dice Adam sentándose en la silla frente al espejo. -Bueno, tendremos que hacerla tuya. Se ve muy simple.- añade. -Empezaré por dejar una foto del hombre más sexy que has visto en tu vida.- dice abriendo su billetera

-¿Chris Hemsworth?- pregunto riendo.

Adam me lanza una mirada de odio desde el espejo y termina de encajar una foto suya en el espejo que consta de cuatro marcos diferentes de él haciendo caras.

-La primera para que recuerdes lo bello que soy, la segunda para que me pienses, la tercera para que nunca olvides divertirte y la última para que recuerdes que soy yo quien te cuida

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-La primera para que recuerdes lo bello que soy, la segunda para que me pienses, la tercera para que nunca olvides divertirte y la última para que recuerdes que soy yo quien te cuida.- dice enseñándome cada uno de los marcos.

Y yo río porque es un tonto, pero a la vez porque me encanta y porque en cada foto se ve perfecto.

Adam pone su mano derecha en mi cadera y me hala levemente hacia él haciendo que yo de unos cuánto pasos hasta estar sentado en su pierna derecha mirándonos en el espejo.

-¿Cuál es tu sueño más grande?- pregunta.

-Tener mi propio show.- respondo, dejando que mi cuerpo descanse sobre el suyo mientras el empieza a empujar la silla de un lado a otro suavemente con sus talones como si estuviéramos bailando un vals sobre ella. -Y darle la oportunidad a otras drag de mostrar su talento y su estética-

-Podemos lograrlo.- dice.

-¿Qué hay del tuyo?- pregunto.

-Me gustaría tener mi propia empresa de logística.- dice. -¿Has visto películas como los angeles de Charlie?-

PERFORMING ARTS.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora